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El director de soberanos en América Latina de Fitch Ratings, Carlos Morales, dijo que la inflación “persistentemente” alta en México orilló al Banco Central (Banxico) a incrementar la tasa de política económica en 50 puntos base, de 5.50% hasta 6% en su primera reunión del año, también marcada por la intervención de la gobernadora entrante.
“Esta es la primera decisión de política liderada por la nueva gobernadora Victoria Rodríguez.
“Los factores externos, incluidos los altos precios de la energía, impulsan las presiones inflacionarias dadas las continuas señales de atonía de la demanda interna” destacó Morales.
El experto recordó que una leve disminución de la inflación general en México durante enero vino acompañada de un aumento de la inflación subyacente, en niveles no visto en años.
La carrera de los precios en el país pareció apaciguar en enero pasado, cuando la inflación general pasó de 7.36% en diciembre, a 7.07%. Sin embargo, el índice subyacente, con un peso de poco más de 61% del índice general, resultó en +0.62%, a tasa mensual, el mayor reportado para un mes de enero desde 2014, con una tasa anual de 6.21%, también su nivel más alto desde 2001.
En noviembre pasado, Fitch ratificó la calificación soberana de México en “BBB-“por lo que la mantiene dentro del rango conocido como Grado de Inversión (Investment Grade).
Los grados de México están respaldados por una política macroeconómica consistente, finanzas externas relativamente estables y robustas, mientras que la agencia proyectó que la deuda pública con relación al PIB “se estabilice en niveles en línea con la mediana de ‘BBB’”.
Sin embargo, Fitch destacó que la calificación asignada a México se ve limitada “por una gobernanza relativamente débil y un crecimiento moderado a largo plazo”.
Aunque la agencia mencionó en su ratificación que la inversión en México recuperó el paso desde la segunda mitad de 2020, “lo hará desde un nivel bajo”, además de que persisten las preocupaciones sobre el crecimiento potencial del País.
La inversión privada lleva mostrando caídas desde 2019, cuando retrocedió -4%.
“Antes de la pandemia, la inversión privada estaba siendo frenada por intervenciones de política gubernamental que afectaron la confianza, principalmente en el sector energético”, advirtió Fitch el 17 de noviembre.
“Asumiendo un crecimiento superior a la tendencia hasta 2022, podría permanecer por debajo de su nivel pre Pandémico hasta mediados de 2024”, resaltó a su vez sobre las mediciones de Producción Industrial de México hasta esa fecha.