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A unas horas del Tazón México VII, el comisionado de la LFA, Alejandro Jaimes, hace un balance de la Temporada 2024 y anuncia los planes para 2025.
En lo deportivo, la Temporada 2024 de la Liga de Futbol Americano (LFA) fue todo menos aburrida.
Un escándalo de corrupción obligó al circuito a bajar de diez a nueve equipos, escuadras con marcas perdedoras vencían a los ganadores y un equipo —Caudillos de Chihuahua— ahora está a un paso del bicampeonato invicto.
Pero, ¿en lo económico y estructural?
— ¿Cómo llega la LFA al Tazón México VII? —pregunta Fortuna al comisionado de la liga, Alejandro Jaimes.
— En la parte de afición hemos creciendo; cada vez hay más afición en los estadios. Si bien es distinto en cada una de las plazas, hay algunas donde todavía no logramos que se tenga el impacto, que se llenen los estadios, pero en muchas otras la gente asistió.
“Comparado contra el año pasado tenemos una mejor asistencia promedio; casi llegamos a los 3,500 aficionados cuando, en la temporada pasada, estábamos en los 3,300 o 3,400.
“Hay plazas que son muy atractivas, donde va mucha gente, como Tijuana, Chihuahua, Saltillo, Querétaro. Hay otras donde no hemos logrado que la gente asista y, sin embargo, crecimos en general.
“En el tema de las transmisiones también tuvimos un incremento en aficionados conectados de forma simultánea en un juego, en reproducciones de los partidos.
“Entonces creo que, en general, es una buena temporada; en lo deportivo mejor pero, el balance que puedo hacer, es una muy buena temporada y falta la cereza del pastel que es el Tazón México VII.
OPORTUNIDADES DE CRECIMIENTO
Una de las principales áreas de oportunidad para la LFA es el tema de los estadios.
Algunos equipos —Tijuana, Chihuahua y Querétaro— cuentan con importantes instalaciones, mientras el equipo de Saltillo juega en el campo de béisbol de los Saraperos —lo que recuerda a la NFL de los años setenta— y los capitalinos lo hacen en instalaciones universitarias o en el Estadio Jesús Martínez “Palillo”.
El problema no es solo de la LFA.
México como país adolece de infraestructura deportiva e incluso el Estadio Azteca recibirá una inyección de 900 millones de pesos —solo en este 2024— para cumplir los requerimientos del mundial de la FIFA en 2026.
— ¿Qué se puede hacer en el tema de los estadios?
— El problema está muy detectado. La primera dificultad que tenemos es que no tenemos estadios propios a diferencia de otros deportes. Salvo el estadio de Galgos de Tijuana, todos los estadios son rentados, son concesionados y eso nos dificulta el accionar para algunos equipos. No se pueden hacer mejoras ni modificaciones debido a que no somos propietarios.
“Es en la Ciudad de México donde tenemos la crisis más fuerte porque, tienes los estadios de Ciudad Universitaria, el Azteca y el Azul pero, además de que tienen más de 50 años, económicamente todavía no estamos para poder rentar algunos de esos estadios para jugar de manera semanal.
“Hemos buscado los estadios universitarios que son los que más nos cubrirían la necesidad, estadios con 3,000 o 5,000 lugares algunos, pero no nos permiten la venta de bebidas alcohólicas, de cerveza. Por eso tenemos estadios que no son el mejor venue para el deporte profesional.
“En la Ciudad de México estanos buscando como liga, en conjunto con los equipos, algún estadio que nos pudieran concesionar; un estadio tal vez único para los dos equipos —Raptors y Mexicas— pero que nos permitieran arreglarlo, tener un contrato a diez años que nos permitiera hacer una inversión que valga la pena. Sí, es una asignatura pendiente”.
LFA Y LOS PLANES DE 2025
La súbita desaparición de los Reds CDMX a finales de 2023 provocó que el número de equipos de la LFA pasará de diez a nueve.
Sin embargo, Alejandro Jaimes explica que, entre los principales proyectos de 2025, estaría regresar a la decena de equipos y hay dos ciudades que han levantado la mano.
“Tenemos dos ciudades que han estado muy insistentes y con las cuales hemos estado trabajado para que logren tener la infraestructura necesaria para tener un equipo LFA”, explica Alejandro Jaimes.
Y esas ciudades son Mérida y Puebla.
El modelo de la LFA ya está probado con diez equipos, como se jugó en 2023, y más tarde se podría pensar en una expansión para los años 2026 y 2027.
“Sí hay la intención, sí hay las ciudades y los empresarios, y tenemos un lapso de aquí a septiembre para poder concretarlo”, concluye el comisionado de la LFA.
