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Yareth Arciniega y Claudia Villegas
En 1987, la Ministra de la SCJN, Yasmín Esquivel, quien actualmente se encuentra envuelta en una polémica por el supuesto plagio de su tesis de licenciatura, fue asesorada para realizar dicha investigación por Martha Rodríguez Ortiz, académica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en la FES Aragón, quien a pesar de los limitados recursos tecnológicos de la época, que según el INEGI representaban sólo un par computadoras por cada mil habitantes en México, logró coordinar 15 trabajos de investigación.
A pesar de los esfuerzos por parte de distintas instituciones para impulsar la expansión de la tecnología, en este año las computadoras aún eran escasas en el país: según el INEGI sólo se registraban 3.2 por cada mil personas. Sin embargo, este factor aun no representaba un obstáculo para académicos como Rodríguez Ortiz, que el 87 logró dirigir 15 tesis de licenciatura. Pero la brecha tecnológica que sufría el país a finales de la década de los ochentas también permitió que fuera más sencillo ocultar con los ejemplares impresos de las tesis si se registraba algún plagio porque no había posibilidad de digitalizarlas ni de compartirlas, más allá de los ejemplares que repartían los asesores y los propios postulantes.
De acuerdo con registros de la UNAM, la profesora Rodríguez Ortiz ha sido parte de la plantilla docente de la Facultad de Estudios Superiores Aragón desde su creación, en 1975, pero no comenzó a fungir como asesora de tesis sino hasta 1983, año en el cual dirigió sólo tres trabajos de investigación. Quien tenía una gran actividad en la carrera de derecho en la FES Aragón fue el abogado Yulic Barrientos Solís, profesor de esa casa de estudios, quien fue ministro del Tribunal de Justicia Administrativa de la Ciudad de México (TSJCDMX), a quien la ministra de la SCJN, Yasmín Esquivel Mossa, dedicó su tesis. Años más tarde, Esquivel también llegaría a ser ministra del mismo tribunal.
El posible plagio de la tesis de licenciatura enrarece también la participación de la familia Riobóo Esquivel porque actualmente participan como socios en la Universidad Westhill, una institución académica que busca participar en carreras altamente demandadas como medicina. En su oferta educativa también destaca la carrera de derecho.
La profesora Rodríguez Ortiz, la asesora de Esquivel, tuvo un desempeño efervescente en la UNAM, ya que para 1985, año en que la ministra de la SCJN asegura haber comenzado la investigación para su tesis de licenciatura, su asesora ya había coordinado alrededor de 10 trabajos que, sumados a los que vendrían en los siguientes meses, darían un total de 28 al finalizar el año.
Siguiendo la misma trayectoria, los registros de la máxima casa de estudios revelan que el año siguiente la académica coordinó aproximadamente 26 investigaciones entre las que se encontraba “Inoperancia de los Sindicatos en los Trabajadores de Confianza del Artículo 124 Apartado “A” , un trabajo aún realizado a máquina, por medio del cual, en julio, se le otorgó el grado de Licenciado en derecho al entonces estudiante Ulises Báez Gutiérrez, de quien no se logró ubicar información sobre su desempeño como litigante a través de las redes sociales.
De la misma forma, en 1987, la académica asesoró 15 trabajos, entre los que se encontraba la investigación de Esquivel Mossa, la cual hace unos días se descubrió sólo se diferencia de la presentada por Baez Gutiérrez, un año antes, por la máquina de escribir que se utilizó, una leve variación en los títulos y una “postura personal” que Báez asentó en su versión, seguida por las conclusiones que también son las mismas.
Para 1988, según datos del Banco de México y el INEGI la situación del país, en cuanto al uso de las tecnologías de la información aún era inferior a la de los países asiáticos recientemente industrializados, Japón y Estados Unidos, esto representaba una limitante a la hora de realizar, asesora y corregir trabajos académicos, pues solo se tenía registro de 4.8 computadoras por cada 1000 habitantes.
A pesar de significar un avance, esto no tuvo mucho impacto sobre el desempeño de académicos y profesores de la UNAM; a Rodríguez Ortiz sólo le significó 16 asesorías más, en comparación con el año anterior.
Dos años después de haber aprobado su examen profesional, en 1989, documentos de la UNAM, a los que tuvo acceso Revista Fortuna, revelan que Yasmín Esquivel comenzó a ejercer como profesora de la entonces Escuela Nacional de Estudios Profesionales Aragón de la UNAM con clave y categoría de “profesor de asignatura “A”. En este año, Rodríguez Ortiz coordinó alrededor de 23 trabajos de investigación; México también había aumentado a 6 computadoras por cada mil habitantes.
Hasta este punto, las cifras muestran que a medida que incrementaba el uso de las computadoras en México también lo hacía el número de trabajos asesorados Marta Rodríguez Ortiz, quien en 1995 llegó a su punto máximo con 35 investigaciones bajo su tutela. Igual que la de Báez y Esquivel, todas aprobadas. La digitalización, sin embargo, no era tan alta como en los siguientes años.
Bajo el mismo curso, una década después, en 1998 mientras la Universidad Panamericana hacía constar que Yasmín Esquivel, quien entonces era licenciada, había aprobado satisfactoriamente los cursos de posgrado requeridos para iniciar su trámite para obtención del título de Maestra en Derecho, Rodríguez Ortiz dirigió a no menos de 25 estudiantes. México registraba entonces poco más de 25 computadoras por cada 1000 habitantes.
Actualmente, 74 % del total de la población en México utiliza una computadora y la licenciada Rodríguez Ortiz sigue siendo profesora de carrera de tiempo completo; imparte la clase de Derecho del Trabajo y a la fecha tiene un registro de poco más de 500 tesis de licenciatura, pero desde 2008 el número de proyectos que dirige ha disminuido considerablemente.
Gracias a la controversia que hoy envuelve a la Doctora y Ministra Yasmín Esquivel y a la Universidad Autónoma de México, los medios han dado cuenta más de un par de tesis presentadas en años posteriores que, de forma similar a las de Báez y Esquivel, tienen similitudes entre sí, estas han sido asesoradas por la misma académica, así como por otros profesores de la UNAM.
En la FES Aragón, de 2020 a la fecha no se ha registrado el nombre de la profesora Martha Rodríguez Ortiz como asesora de un proyecto de titulación.
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