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Los recientes indicadores, si bien son positivos, no deben confundirse con una sólida recuperación económica, alertó el organismo.
Si bien los últimos indicadores han resultado positivos, la economía mexicana se encuentra lejos de una recuperación hacia los niveles prepandemia o incluso anteriores al 2018 “que eran, de por sí, ya modestas y desalentadoras”, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
Segun el organismo, los últimos datos del INEGI muestran avances favorables que, “en primera instancia, han motivado una mejor expectativa sobre la evolución de la economía en su conjunto por parte de varios comentaristas y analistas”.
Por ejemplo, en marzo, el índice de inversión fija bruta “posiblemente el indicador más relevante en el proceso de recuperación” tuvo un repunte mensual de 2.9%, después de que un mes antes había caído 2.3%.
Dentro del índice de inversión resalta el repunte mensual de 5.2% en construcción, tanto residencial como no residencial “signo de reactivación conforme la economía regresa a su actividad normal”.
“No obstante dichos resultados, es claro que el nivel de la inversión aún está lejos de recuperar realmente lo perdido, al menos en esta administración”, reconoció el CEESP.
Al igual que la evolución reciente de la inversión, el avance de la producción industrial es un resultado favorable en el proceso de recuperación de la economía. “Pero también es insuficiente para recobrar lo perdido tanto en su nivel como en su tendencia”.
“Su valor aún está 0.7% por debajo de su nivel prepandemia y es 3.5% inferior a julio de 2018. Respecto a la tendencia que mostraba hasta febrero de 2020, el indicador se sitúa 9% por debajo en abril pasado”, detalló.
Incluso la generación de empleo “muestra la dificultad que tienen las empresas para abrir nuevos puestos de trabajo formales en un entorno de creciente incertidumbre y pocos incentivos para invertir más allá de lo necesario para mantener la operación de las empresas”.
En resumen, “aunque la coyuntura señala varios elementos optimistas para la reactivación de la economía, es importante considerarlos con cautela y evitar interpretaciones apresuradas que generen expectativas equivocadas”, concluyó el CEESP.
Por Raúl Castro-Lebrija