Guerra afectaría estrés financiero de 25% de empresas A. Latina: Moodys

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La calificadora internacional Moody´s Investors Service aseveró que el conflicto bélico-militar por la invasión rusa en Ucrania afectaría al 25% de las empresas que operan en América Latina bajo su monitoreo, con un estrés financiero de moderado a alto, mientras que un 10% resultaría beneficiado, entre ellas las compañías mineras y de metales

Las aerolíneas latinoamericanas, en contraste, enfrentarían el mayor riesgo general, de acuerdo con un informe de la agencia fechado el 20 de abril y distribuido hoy.

Moodys indica que un menor crecimiento de la economía global y un acceso limitado a los mercados internacionales de capital a consecuencia de la guerra serían los detonantes del resultado, tomando en cuenta un escenario a la baja, y pese a la limitada exposición comercial de la región con los dos países en conflicto.

“Bajo nuestro escenario a la baja, esperamos que 21% de las empresas no financieras calificadas en América Latina (presenten un) estrés moderado y sólo un 3% un estrés alto”, asegura.

El escenario a la baja de la calificadora incluye el cese del comercio de la energía entre Rusia y Europa, provocando un “estrés significativo en todo el mundo, independientemente de qué lado lo inicie”.  Una recesión económica en Europa, sentencia, causaría probablemente una desaceleración aguda y una recesión a nivel global.

En el ámbito financiero, la crisis por los energéticos ampliaría los diferenciales de rendimiento “considerablemente”, mientras el riesgo de refinanciamiento se tornará “problemático”.

“El riesgo de una contracción económica, mayor inflación y aumento de las tasas de interés conducirán al contagio a través de

varias industrias y un gran número de empresas de grado especulativo, especialmente aquellas con vencimientos en o antes del 2023”, advierte.

Moodys estima que el conflicto se extenderá por varios meses, mientras que las sanciones impuestas por Occidente a Rusia tomen al menos dos años, hacia el 2024, lo que implicará que los pecios del petróleo, los alimentos y los metales, con una tasa promedio anual en América Latina de 7.3% en febrero, sigan presionados.

El transporte es uno de los sectores más vulnerables de la región, con una escalada en precios de 13% en promedio hasta febrero, seguido por los alimentos, con un 11.7%, lo que en conjunto representa el 40% del índice de precios al consumidor en la canasta promedio.

“En nuestra línea base no pronosticamos una recesión mundial generalizada, pero cuanto más se prolongue la crisis y más aumenta, mayor es el riesgo de una recesión global”, advierte.