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El Banco de México dijo el miércoles en su Informe Trimestral octubre-diciembre que redujo sus estimados de crecimiento del PIB para este año, desde el +3.2% previo hasta niveles de +2.4%, con un rango que oscila entre +1.6% y +3.2%.
“La revisión para 2022 responde, principalmente, a que la marcada debilidad de la actividad económica en el último trimestre de 2021 condujo a una menor base de crecimiento para el año en curso a la esperada anteriormente”, destaca.
El Banco Central señala en el documento que el contexto mantiene incertidumbre respecto de la evolución de la Pandemia y sus efectos en la actividad económica, al tiempo que menciona que los conflictos geopolíticos se han incrementado provocando que el balance de riesgos para el crecimiento enfrente un sesgo a la baja.
Entre los riesgos a la baja del crecimiento de la economía mexicana, el Instituto Central menciona por primera vez la discusión en torno a una posible “reorganización del Sector Eléctrico”.
De esta manera, resalta, entre estos riesgos “que la recuperación del gasto en inversión sea menor a lo esperado o insuficiente para apoyar el proceso de reactivación de la economía y el crecimiento de largo plazo.
“En este sentido, que una posible reorganización del sector eléctrico dé lugar a un entorno menos propicio para la inversión”, asevera.
El Banco Central menciona también que en el muy corto plazo, es decir, en los primeros tres meses de este mismo año, la actividad económica en México pudiera retomar “una senda de crecimiento gradual”, apoyada tanto por la demanda externa “como por la interna”, al tiempo que colocó al alza su proyección de crecimiento para 2023, al pasar de +2.7% a +2.9%.
Los rangos de los estimados de crecimiento para 2023 colocan entre +1.9% y +3.9%.
Banxico dijo en su informe que para el próximo año mantiene una expectativa de expansión trimestral similar a la previamente anticipada, de modo que la revisión para ese año en su conjunto está determinada por los efectos de base de crecimiento del año previo.
“De materializarse un crecimiento en 2022 cercano a la parte superior del rango señalado (+3.2%), la actividad económica recuperaría en el tercer trimestre del año en curso el nivel observado al cierre de 2019”, resaltó.
Con un crecimiento cercano a la estimación puntual para 2022, hoy de rebajada al +2.4%, dicha recuperación ocurriría hacia el cuarto trimestre de este año.
Agregó que con un crecimiento cercano a la parte inferior de los rangos descritos (+1.6%), el nivel observado al cierre de 2019 se alcanzaría hasta el segundo trimestre de 2023.
Riesgos
Entre los riesgos a la baja en el horizonte de pronóstico sobre la economía mexicana sobresalen que la persistencia de la pandemia dé lugar a una recuperación menos vigorosa.
Que se prolonguen o se intensifiquen los problemas de cuellos de botella en las cadenas de suministro a nivel global, generando escasez de insumos para algunos sectores en México, o que la Pandemia desatada por el Covid-19 conduzca a mayores costos en los insumos y en los procesos de producción en diversos sectores de la economía.
Otro de los puntos destacados es que se observen episodios adicionales de volatilidad en los mercados financieros internacionales que afecten los flujos de financiamiento para las economías emergentes.
