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Las compañías distribuidoras advirtieron que la propuesta del gobierno para establecer precios máximos al gas LP provocará un mercado negro de este combustible; es decir, una especie de “huachicol gasero”.
La Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas LP y Empresas Conexas (Amexgas), aseguró que el control de precios no contribuye a resolver los problemas de esta industria “porque incentiva al robo de gas LP a Pemex y su distribución ilícita”.
Además favorece “el fortalecimiento de grupos de choque y de poder que controlan zonas de reparto, a través de pseudo sindicatos y organizaciones delictivas, tal y como se están manifestando en la Zona Metropolitana del Valle de México”.
La Amexgas advirtió que el precio establecido por la Comisión Reguladora de Energía —que será revisado de forma semanal, según el presidente López Obrador— no permite recuperar los costos de la distribución por lo que generará desempleo y desabasto por disminución de rutas de reparto.
También provocará “inseguridad por en las operaciones por menor mantenimiento a la infraestructura de distribución e incremento del consumo de leña de la población más vulnerable”.
Por separado, Adrián Rodríguez, presidente de la Unión de Gaseros del Valle de México, alertó que en el país existen tomas clandestinas de gas LP. Incluso se han descubierto ductos de gas ilegales en estados como Puebla, Tlaxcala y en el Bajío.
“Ellos —el crimen organizado— son los que necesitan distribuir ese gas y llevarlo clandestinamente a los hogares. Ellos son los que cobran derecho de piso. Antes éramos tan libres que podíamos ir de Ecatepec a la zona norte y de la zona norte a la zona oriente”, denunció.
“Ahora —continuó— la zona oriente es de las masas vulnerables porque ni siquiera podemos entrar si no pedimos permiso o se paga una cuota para que no te enciendan tu pipa o te lastimen”.
De hecho, Adrián Rodríguez estimó que, entre el 15 y 20% de la venta del gas puede ser ilegal, dependiendo de la zona.
Finalmente, reconoció que el costo del gas LP ha pasado de entre diez y 11 pesos el litro, en diciembre, a 16 pesos entre junio y julio. Sin embargo, aclaró que ni las distribuidoras de gas ni los comisionistas tienen injerencia en el establecimiento de estos precios, que se determinan a nivel internacional.
Advirtió que, debido al tope, los comisionistas que distribuyen gas LP han visto disminuidos sus márgenes de dos a cuatro pesos por litro de gas vendido a, solamente, entre 30 y 50 centavos.
Por Raúl Castro-Lebrija