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Este domingo, la Auditoría Superior de la Federación informó a la Cámara de Diputados que encontró probables daños al erario en la Cuenta Pública de 2020, por casi 50,000 millones de pesos.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que se irán aclarando las observaciones hechas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a la Cuenta Pública del 2020 —que sumarían casi 50,000 millones de pesos— y advirtió que si se encuentran delitos, se van a castigar.
No obstante, aprovechó una vez más la conferencia de prensa matutina para advertir que los señalamientos de la ASF son aprovechados por los opositores a su gobierno para atacar a su administración.
De acuerdo con el Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2020, la Auditorio Superior de la Federación encontró probables daños al erario Port 49,765 millones de pesos..
En la Refinería Olmeca (Dos Bocas) la ASF efectuó observaciones por 59.2 millones de pesos y señaló pagos indebidos profesionistas, desmonte de zonas de selva y en la asignación de de contratos por invitación y por asignación directa.
En el Tren Maya —uno de los proyectos emblemáticos de la actual administración— las observaciones de la ASF suman 256.1 millones de pesos y advirtió que se pagaron trabajos antes de su ejecución y a precios alzados.
Incluso en el programa Sembrando Vida —que López Obrador pretende exportar a Centroamérica— las observaciones usan 901 millones de pesos en probables daños al erario. Esto, entre muchas otras dependencias.
Cuestionado al respecto, el presidente López Obrador aseguró que “se van a ir aclarando todas las irregularidades que, según la Auditoría (Superior) de la Federación, se encontraron en la Cuenta Pública. Así es siempre, se audita todo y se empieza a aclarar”.
“Recuerden ustedes —añadió— de cómo llegaron a decir de la Auditoría Superior de la Federación nos había costado, el cancelar el Aeropuerto de Texcoco, 300,000 millones y tuvieron que aceptar que se pagaron 100,000 millones a los contratistas que ya tenían compromisos con el gobierno anterior”.
Consideró que las cifras de la ASF son preliminares pero “desde luego, lo usan nuestros adversarios, los conservadores corruptos, porque piensan que es lo mismo”.
Sin embargo, rápidamente cambió el tema par insistir otra vez en que los periodistas que han sido críticos a su gobierno —Carlos Loret de Mola, Joaquín López-Dóriga, Ciro Gómez Leyva, Carmen Aristegui, Jorge Ramos y ahora también incluyó a León Krauze— deben dar a conocer sus percepciones.
Por Raúl Castro-Lebrija
