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El secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Dionisio Pérez-Jácome, rechazó que el gobierno federal haya condicionado las concesiones de la frecuencia de 2.5 Gigahertz (Ghz), de las cuales 42 están en poder de MVS Comunicaciones, y que se decidió el rescate cuando se agotó la última propuesta de las autoridades.
Pérez-Jácome se refirió a las declaraciones del presidente del Consejo de Administración de MVS Comunicaciones, Joaquín Vargas Guajardo, quien afirmó que las concesiones que posee la empresa fueron condicionadas a que la periodista Carmen Aristegui pidiera disculpa al presidente Felipe Calderón.
En febrero de 2011, Aristegui cuestionó en su programa radiofónico el “supuesto alcoholismo” de Calderón.
Al respecto, el secretario de Comunicaciones dijo: “les quiero decir que no hubo tal chantaje, al contrario, él amenazó con decir lo que iba a decir el día de hoy, y se le dijo claramente que era mentira. Se le dijo que lo que tenia que hacer era pagar lo que valían las frecuencias. Entonces, no hubo ningún condicionamiento, el tema se abrió a diversas reuniones”.
“Tan es así es que tuvimos cerca de 20 reuniones que me ha tocado a mi como secretario, con el grupo para tratar estos temas, y analizamos todas las posibilidades. Al agotarse la última propuesta del gobierno federal es que optamos por el rescate de la frecuencia de 2.5 Ghz”, aseveró Pérez-Jácome en declaraciones a periodistas en el marco de la inauguración de carreteras en Durango.
Para el funcionario, “el problema con la banda 2.5 es que está altamente subutilizada, no la utiliza plenamente, precisamente entre otros elementos porque no ha aceptado pagar lo que consideramos que es justo pagar por estas bandas y no ha permitido tampoco que las utilicen otros”.
La Coordinación de Comunicación Social de la Presidencia, que encabeza Alejandra Sota, acusó a Vargas Guajardo de calumniar, tergiversar y engañar para alcanzar sus metas económicas y aseguró que el gobierno federal no cederá “a la presión y el chantaje”.
“Cuando no son los principios los que rigen el proceder de cualquier institución, sea privada o pública, se corre el gran riesgo de hacer lo que el señor Vargas hace: calumniar, difamar, tergiversar y engañar, con el simple objetivo de alcanzar sus metas económicas. El intentar imponer intereses financieros por encima de los de México, es inadmisible para el gobierno federal”, indicó.
En un comunicado, la Coordinación de Comunicación Social aseguró que ”no se cederá frente a la presión y el chantaje, al tiempo que nos reservamos la valoración de proceder conforme a derecho”.
Rechazó participación alguna en las decisiones de la empresa respecto a la periodista Carmen Aristegui, ya que señaló “la decisión editorial de MVS corresponde única y exclusivamente a MVS, no al gobierno federal”. Además, afirmó que la política de comunicación social de la Presidencia está completamente diferenciada de la política pública en materia de telecomunicaciones.
También rechazó haya ofrecido a Vargas Guajardo viabilidad al proyecto de la banda 2.5 Ghz a cambio de que no impugnara la resolución de concentración de Televisa en Iusacell. “La última vez que la titular (de la Coordinación de Comunicación Social de la Presidencia) tuvo contacto con MVS fue en febrero de 2011”, indicó.
El ex secretario del Trabajo, Javier Lozano, acusó al presidente de MVS Comunicaciones de utilizar a Carmen Aristegui como una “moneda de cambio” para obtener la concesión de la banda de 2.5 GHz.
Para el senador electo por el Partido Acción Nacional (PAN), la contratación de Aristegui en MVS fue para lograr un contrapeso a Televisa, “para utilizarla como un brazo político”.
Lozano Alarcón lamentó que Vargas Guajardo haya utilizado “una conversación de amigos” donde le dio un consejo de que “con este gobierno no se chantajea”.