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Las mujeres son armonizadoras naturales y eso es lo que se necesita, armonizar ámbitos. Las empresas familiares de mayor tamaño y más longevas tienen mayor interés en promover el liderazgo femenino, a fin de mantener un ambiente de trabajo positivo y fomentar el compromiso y la responsabilidad entre accionistas, empleados, clientes y s terceros relacionados.
*Por: Ricardo Aparicio Castillo
Es alentador ver cómo las mujeres van ganando espacios en el mundo empresarial. Cada vez son más evidentes y claros los aportes que hacen en temas profesionales. En este sentido, las empresas familiares crean de forma natural ambientes de trabajo propicios para el desarrollo del liderazgo femenino.
El hecho de tener como ejemplo a mujeres accediendo a puestos de liderazgo parece estar inspirando cada vez más a las mujeres de las siguientes generaciones de la familia empresaria a prepararse como líderes de sus compañías. Dicho de otro modo, cuantos más puestos de liderazgo estén en manos de mujeres, mayor será el número de mujeres que deseen optar a estos puestos.
Desde el Centro de Investigación para Familias de Empresarios|BBVA hemos estado monitoreando el estado que guardan este tipo de organizaciones y es positivo comprobar que cada vez hay más mujeres en posiciones de liderazgo. De acuerdo con el reporte 2022 del Estudio “Nivel de progreso de las Empresas Familiares para lograr su continuidad y armonía”, un 29% de los liderazgos en las empresas familiares lo ejercen mujeres.
Una gran fortaleza de las empresas familiares viene precisamente del ámbito familiar. La capacidad de las familias de apoyarse y crear ambientes de crecimiento, donde las personas puedan alcanzar su plenitud. Cuando esta clase de situaciones se logra llevar a la empresa, se crea una ventaja natural para atraer y desarrollar el talento externo que complementa al familiar.
Suele existir un falso dilema sobre qué va primero, si la empresa o la familia. Es falso porque no se trata de un “O”. El secreto está en el “Y”. Empresa y familia, familia y empresa.
Talento femenino
Las mujeres son armonizadoras naturales y eso es lo que se necesita, armonizar ambos ámbitos. Las empresas familiares de mayor tamaño y más longevas tienen mayor interés en promover el liderazgo femenino, con el fin de mantener un ambiente de trabajo positivo y de fomentar el compromiso y la responsabilidad entre los accionistas, empleados, clientes y todos los terceros relacionados.
Las mujeres crean diferentes tipos de empresas familiares, fundadas en relaciones de confianza más que en relaciones económicas.
Las mujeres tienden a ser líderes transformacionales naturales, es decir, que promueven el espíritu de compromiso, la participación de todos, comparten el poder y la información y son capaces de despertar pasión e inspirar a quienes dirigen.
También son naturalmente capaces de gestionar los momentos de crisis (de aquí surge el consejo: “piensa en crisis-piensa en femenino” que suele darse en situaciones límite). La empatía y sensibilidad natural que tienen les ayuda a ver nuevas formas de soluciones, con visión de más largo plazo y donde se logren situaciones de ganar-ganar.
Balance natural
La mujer siempre ha tenido un rol central en las empresas familiares. En muchas empresas multi-centenarias, en épocas de guerra han sido las mujeres quienes han dado continuidad a la empresa mientras que los esposos estaban fuera.
También es el caso de grandes empresarias que han asumido la dirección al fallecimiento de su esposo. Siempre ha sido central en la educación de los hijos, y la consecuente transmisión de valores. En muchos casos ejerce el papel de “chief emotional officer”. Con frecuencia, la mujer ha ejercido un gran poder, pero detrás de las escenas. Hoy en día lo hace ya de forma abierta y directa.
Las mujeres tienen motivaciones más amplias y diversas, por lo que le dan más importancia al balance familia-trabajo, tan necesario hoy en día.
Crean diferentes tipos de empresas familiares, fundadas en relaciones de confianza más que en relaciones económicas. En puestos de liderazgo tienen un efecto positivo en las labores de filantropía y responsabilidad social corporativa, así como en el cuidado del medio ambiente y de la comunidad en la que la empresa opera.
Las empresas familiares de mayor tamaño y más longevas están promoviendo decididamente la participación de las mujeres en puestos de liderazgo, convirtiéndose así en modelos a seguir por los beneficios que supone la complementariedad hombre-mujer en el liderazgo y el gobierno de todo tipo de empresas.
Por todo esto, y más, esperemos ver cada vez más mujeres en posiciones de liderazgo.
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