Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 56 segundos
Si se integran en una sola empresa del estado la operación de un aeropuerto y una aerolínea, como propone la iniciativa de reforma a las leyes de la aeronáutica, se podrían generar tratos discriminatorios contra los competidores de una posible aerolínea paraestatal, incluso otras conductas que impactarían en el costo de las tarifas aéreas.
La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) recomendó al legislativo mexicano no aprobar en sus términos las iniciativas de reforma a Ley de Aviación Civil y la Ley de Aeropuertos presentadas por el Ejecutivo Federal y el Diputado Omar Enrique Castañeda González, pues pondría en riesgo la competencia y libre concurrencia en el mercado mexicano de la aviación.
La Cofece remitió una opinión a los secretarios de Gobernación, Adán Augusto López; de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, Jorge Nuño Lara; al director general de la Agencia Federal de Aviación Civil, Miguel Enrique Vallín Osuna; y a los diputados Víctor Manuel Pérez Díaz, presidente de la Comisión de Comunicaciones y Transportes de la Cámara, y Castañeda González.
En su opinión la Comisión establece que con la aprobación de dichas reformas se permitiría que una empresa estatal operara simultáneamente un aeropuerto y una aerolínea, lo que generaría discriminación en el acceso a la infraestructura aeroportuaria para otras aerolíneas competidoras, “en detrimento del desarrollo eficiente del mercado de transporte aéreo”.
Conforme a la iniciativa del ejecutivo la SICT otorgaría títulos de asignación a entidades paraestatales para que administren, operen y exploten de aeropuertos.
“En ese sentido, cuando una aerolínea ejerce el control de un determinado aeropuerto, podría tener incentivos para negarse a brindar, o degradar, el servicio de acceso al mismo a sus competidores o a restringir las condiciones de uso”, consideró.
OPN-001-2023
Riesgos a la competencia detectados
Específicamente la Comisión puntualizó que la empresa paraestatal, debido al poder que le daría su posición y estatus, podría:
- Dar ventajas indebidas en la provisión de los servicios aeroportuarios.
- Aumentar o instaurar nuevas tarifas por el uso del aeropuerto que aumente que los precios o reduzca los márgenes de ganancia de sus competidores.
- Otorgar subsidios cruzados entre los cobros que haga por servicios aeroportuarios y sus tarifas aéreas.
- Negar el acceso a la infraestructura a otras aerolíneas.
Para que la industria aérea tenga un desarrollo eficiente es indispensable que los aeropuertos permitan el acceso y uso de su infraestructura a todas las empresas que ofrezcan los servicios de transporte aéreo, explicó la Cofece.
Además, de acuerdo con el análisis de la Comisión, “las iniciativas establecen un trato diferenciado en cuanto a las causales de revocación y conclusión de concesiones, permisos para personas físicas o morales y la asignación a empresas paraestatales”.
En la opinión se destaca que, “en 2022, las actividades del sector transporte representaron una participación de 9.9% del Producto Interno Bruto nacional, y que estas actividades inciden en otros sectores porque permiten el abasto de insumos para elaboración de otros productos o para el consumo de bienes finales, y son factores de sus costos y, por consecuencia, de sus precios.”
El año pasado el transporte aéreo movió 107.4 millones de pasajeros y un millón de toneladas de mercancías.
Te puede interesar: Cofece cita a agentes económicos y personas físicas por posibles concentraciones ilícitas en el mercado de gasolinas y diésel.
