Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 56 segundos
*Por Jorge Gordillo
Es evidente que los inversionistas atraviesan por un momento de euforia, y que apuestan claramente por el éxito de la Fed a la hora de lograr el aterrizaje suave de la economía y un control eficaz de la inflación; clave, la participación de Powell este martes en un evento en Washington
Semana volátil para los mercados financieros. Por un lado, los bancos centrales (Estados Unidos, Eurozona e Inglaterra) cumplieron con las expectativas, en cada caso enfrentando particularidades y retos distintos con relación a la inflación y el riesgo de recesión económica.
La Reserva Federal de EUA moderó su ritmo de alzas de tasas y los comentarios de su presidente Powell cambiaron un poco a lo largo de su intervención de ser decididamente duros a cautelosamente optimistas, lo que dio ánimo temporalmente a los inversionistas y contribuyó a que hubiera ganancias en la mayoría de los activos de mayor riesgo.
Por otro lado, el sólido informe de empleo en EUA correspondiente al mes de enero ha suscitado la preocupación de que la inflación pueda empezar a subir de nuevo y, en consecuencia, que se avecinen subidas más agresivas de las tasas de interés.
Por su parte, en términos generales los reportes de las grandes tecnológicas estadounidenses estuvieron por debajo de las expectativas.
La Fed se alejó de las grandes subidas de 75 y 50 puntos base en un momento en el que la inflación muestra signos de enfriamiento. Powell volvió a alejar las expectativas del mercado de posibles recortes de tasas este año, pero al mismo tiempo señaló un posible final del ciclo de subidas.
No hubo grandes sorpresas en la primera reunión del año de la Fed. La autoridad cumplió con las expectativas al incrementar su tasa de fondeo en 25 puntos base a un rango de 4.50% a 4.75%.
La Fed ha dejado claro que aún se requieren de incrementos adicionales en la tasa de interés de referencia para alcanzar un nivel suficientemente restrictivo. Powell habló de por lo menos dos incrementos adicionales. La conferencia de prensa posterior a la reunión fue una mezcla de hawkish y dovish.
Con Powell reforzando el mensaje de que la Fed todavía no estaba en una postura suficientemente restrictiva y que quedaba más trabajo por hacer, el tono general del comentario de Powell pronto comenzó a cambiar de decididamente duro a cautelosamente optimista.
A los inversionistas les gustaron las declaraciones del banquero central en las que hizo referencia a que el proceso de desinflación ha comenzado y su relativo optimismo sobre la posibilidad de lograr un aterrizaje suave. Estos comentarios contribuyeron a que hubiera ganancias en la mayoría de los activos riesgosos.
Es evidente que los inversionistas atraviesan por un momento de euforia, y que apuestan claramente por el éxito de la Fed a la hora de lograr el aterrizaje suave de la economía y un control eficaz de la inflación.
Sin embargo, este optimismo se moderó un poco después de un sólido informe de empleo estadounidense. Estados Unidos generó 517 mil puestos de trabajo en enero. Este dato supera con creces las previsiones y podría tener implicaciones para las próximas decisiones de política monetaria de la Reserva Federal, ya que suscita la preocupación de que la inflación pueda empezar a subir de nuevo y, en consecuencia, que se avecinen alzas más agresivas de la tasa de interés de referencia.
Los datos de empleo no cambian por completo las apuestas del mercado de que está cerca el fin del ciclo de endurecimiento, pero sí le pone un piso a los niveles que podría bajarse el tipo de cambio.
Sin concesiones
El Banco Central Europeo (BCE) subió sus tasas de referencia en 50 puntos base (pb). El comunicado hace mención que, debido a las presiones sobre la inflación subyacente, la autoridad prevé aumentar las tasas otros 50 pb en su próxima reunión de política monetaria de marzo y posteriormente evaluará la senda futura de su política monetaria.
La institución muestra con rotunda claridad su determinación de seguir elevando las tasas, hasta el punto de detallar la cuantía de la subida que aprobará en la próxima reunión.
Nunca hasta el momento había sido el BCE tan explícito en telegrafiar su próximo movimiento, lo que revela el interés en transmitir al mercado un mensaje de total compromiso con el control de la inflación y de zanjar la expectativa de que no aflojaría el paso.
Los operadores seguirán evaluando los recientes datos de empleo de EUA, así como las declaraciones de funcionarios de la Fed.
El informe de empleo de EUA de la semana pasada seguirá haciendo eco en el comportamiento del peso mexicano. La fortaleza del mercado laboral genera algunas dudas sobre lo que lucía ya como un inminente triunfo de la FED sobre la inflación.
En este sentido, serán relevantes las intervenciones a lo largo de esta semana de funcionarios del banco central estadounidense, incluyendo su presidente Jerome Powell que habla este martes en un evento en Washington.
*Jorge es economista en jefe de CI Banco; dirige el área de análisis económico y bursátil de la institución.
Redes Sociales
Twitter: @gordillo_arias; @CIAnalisis
Youtube: Jorge Gordillo Cibanco.
Linkedln: Jorge Arturo Gordillo Arias
También te puede interesar: Contribuye Wall Street a caída BMV por expectativa discurso Powell; peso observa resiliencia