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La agencia señaló que los nuevos grados reflejan un estimado intrínseco más débil de solidez crediticia en la CFE, en medio de las políticas energéticas que hay en México.
Moody’s Investors Service rebajó el martes la calificación de Comisión Federal de Electricidad (CFE) de Baa1 a Baa2, a la par de los ajustes en el Soberano de México hechos la semana pasada, con una perspectiva que pasó de Negativa a Estable.
El recorte en la calificación refleja una expectativa de apoyo gubernamental implícito “muy fuerte” a la empresa de servicios públicos de electricidad en caso de dificultades financieras.
También incluye la evaluación de dependencia de incumplimiento “muy alta” entre la estatal y el Gobierno mexicano sobre la calificación de una emisión quirografaria senior, con cuatro escalones por encima de la calidad crediticia intrínseca de CFE, y reflejada en su Evaluación Crediticia Base (BCA, por sus siglas en inglés) de ba3 desde el ba2 anterior.
Moody´s señaló que los nuevos grados reflejan un estimado intrínseco más débil de solidez crediticia para la CFE, en medio de las políticas energéticas que hay en México, y con un entorno de precios altos de gas natural a raíz del conflicto militar desatado en Europa del Este tras la invasión rusa a Ucrania a finales de febrero. Moody’s asume precios más altos para el gas natural el próximo año, “muy por encima” de los precios históricos marcados en 2022.
Destaca también que la CFE tiene “cierta flexibilidad” para ajustar sus tarifas a grandes clientes vinculados a la industria y al comercio, aunque estos ajustes, advierte la agencia, no mitigarán por completo las presiones en costos “dados los topes tarifarios y los subsidios vigentes para los clientes cautivos”.
CFE recibe cada año transferencias recurrentes de aproximadamente 70,000 millones de pesos (mdp) para compensar con subsidios la tarifa regular, que son recursos incluidos en el presupuesto federal de cada año; las transferencias los 70,300 mdp en 2021 y para este año se consideran apoyos por un monto de 73,000 mdp.
CFE seguirá beneficiándose de estas transferencias, aunque con retrasos prolongados por el entorno de precios altos, agregó Moody´s.
“Las presiones se suman a una CFE ya debilitada como resultado del impacto de la volatilidad del precio del gas natural”, indicó, al referir la crisis provocada por las heladas en Texas en febrero del año pasado, que resultó en un aumento temporal de sus costos de generación, además de contribuir a una pérdida de 90,000 millones de pesos (mdp) en su utilidad neta, por arriba del estimado de la CFE, de alrededor de 84,000 mdp.
Si bien la empresa espera una transferencia extraordinaria de al menos 45,000 mdp por parte de la Secretaría de Hacienda con el fin de compensar el exceso en costos incurrido en 2021, el momento sigue siendo incierto para la CFE, sentenció Moody´s.
