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A dos días de su inauguración, no hay un análisis costo-beneficio ni se conocen los verdaderos costos del proyecto, expone el organismo.
A dos días de su inauguración, la construcción de la Refinería Olmeca (Dos Bocas) se ha caracterizado por la falta de planeación y la opacidad, acusó el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Según el organismo, si bien se ha señalado que procesará hasta 340,000 barriles diarios de crudo “a unos días de su inauguración, no existe información pública sobre su capacidad de producción en la etapa inicial” que según el presidente López Obrador duraría seis meses.
Peor aún “el desarrollo del proyecto de Dos Bocas se ha caracterizado por la falta de planeación y opacidad: no cuenta con un análisis de costo-beneficio, las obras se iniciaron sin una manifestación de impacto ambiental, no se valoraron alternativas más eficientes para incrementar la producción de petrolíferos en el país. Además, no se conocen los verdaderos costos del proyecto”.
Producto de esa mala planeación se han registrado sobrecosidos.
“La inversión prevista fue de alrededor de 160,000 millones de pesos —8,000 millones de dólare— sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha reconocido un sobrecosto de entre 3 y 4 mmdd: entre 38% y 50% más que lo estipulado en el presupuesto original. El monto final podría ser incluso más elevado”, alertó.
El IMCO también recordó que la Refinería Olmeca ha sido construida por una filial de Pemex —PTI Infraestructura de Desarrollo— “que por su naturaleza jurídica no tiene las mismas obligaciones de transparencia que las empresas subsidiarias o el corporativo, por lo que no hay información suficiente sobre el proyecto en el Presupuesto de Egresos de la Federación o en la Cuenta Pública”.
Asimismo, “la refinería se ha desarrollado con una planeación inadecuada, uso ineficiente de recursos públicos, y en un contexto de opacidad que ponen en duda su viabilidad”.
“Más allá del incumplimiento del calendario de inversión del proyecto, de sus sobrecostos y de la marcada opacidad que lo ha caracterizado, evidencia de las deficiencias estructurales en la construcción de infraestructura en el país, el IMCO considera que la eventual entrada en operación de la Refinería Olmeca será un paso en la dirección contraria de lo que necesita Pemex, el país y el mundo”, concluyó el Instituto.
Por Raúl Castro-Lebrija