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Sin embargo, el organismo propone para reforzarlo, permitir el uso de glifosato en los cultivos y permitir la importación de maíz amarillo genéticamente modificado; es decir, transgénico.
Tal y como está concebido, el programa antiinflacionario que anunciará este miércoles el presidente Andrés Manuel López Obrador “tiene escasas posibilidades de éxito”. Sin embargo, podría enriquecerse con acuerdos entre instancias públicas y la iniciativa privada, consideró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
En su análisis económico semanal, el organismo recordó que el plan pretende generar una canasta de 24 productos que tengan el mismo precio en todo el país. Sin embargo, la medida tendría poco impacto en el Índice Nacional de Precios al Consumidor “y tardaría mucho en verse reflejarse en la inflación”.
“Es posible que el interés del presidente (López Obrador) sea simplemente afirmar en el futuro, en unos seis meses, que la canasta a la que se refiere no aumenta de precios. No sería la primera vez en la que en su discurso descalificara la validez de indicadores generales y robustos”.
“Quizá simplemente sería suficiente que su retórica subrayara que el programa asegura la estabilidad de la canasta ‘del pueblo’ y que el resto del aumento del INPC afecta a otros”, añadió.
Por ello, para reforzar el plan presidencial, el CEESP propone evaluar “los pesos y medidas en el autotransporte que pueden estar impactando significativamente los costos de los fletes. Permitir la utilización del glifosato en los cultivos y permitir la importación de maíz amarillo genéticamente modificado”; es decir, maíz transgénico.
Propone aprovechar más el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea (TLCUE) “que generará mayor acceso a lácteos y cárnicos y nuevas oportunidades para productos en los que México tiene ventajas comparativas”.
Adicionalmente, “revisar las cuotas de importación que el país impone de manera unilateral, como es el caso de carne fresca o congelada de bovino, pollo y cerdo. Su eliminación reduciría las presiones internas en los precios de productos relacionados”.
El CEESP sugiere lograr acuerdos entre fabricantes de semillas e insumos “para lograr mejores precios e incentivar tecnologías que elevan la productividad. Fortalecer a la Comisión de competencia (Cofece), la procuraduría del consumidor (Profeco), la Guardia Nacional, y a los gobiernos estatales a fin de combatir prácticas de especulación, fijación de precios, y cobros de piso”.
Incluso “evitar o contener aumentos en el peaje de autopistas y revisión de las cláusulas de las concesiones para identificar oportunidades en este sentido”.
Por parte, en la banca de desarrollo, el organismo propone financiamientos a tasas más favorables, seguros agrícolas para pequeños productores y fortalecer a Agroasemex para ampliar la cultura de la cobertura de riesgos.
A nivel macroeconómico, el organismo también propone reforzar el papel de Banco de México en el combate a la inflación, mantener la disciplina en las finanzas públicas, evitar la aplicación de subsidios y los incrementos salariales cuantiosos.
“El mejor antídoto para la inflación que se puede generar internamente es un mejor funcionamiento de los mercados y se puede trabajar en medidas y mecanismos cooperativos de coordinación que lo permitan”, concluyó el CEESP.
Por Raúl Castro-Lebrija
