Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 27 segundos
En Cuernavaca, Morelos, el mandatario insistió en que se eliminarán los actuales contratos de autoabastecimiento y que no se indemnizará a las empresas que resulten afectadas con esta medida.
El presidente Andrés Manuel López Obrador confió en que, antes de que concluya el próximo mes de abril, el Congreso de la Unión votará la iniciativa de reforma constitucional en materia eléctrica que impulsa su gobierno.
E insistió en que la reforma eliminará por completo los actuales contratos de autoabastecimiento —que han permitido a algunos corporativos pagar menos por la luz que los consumidores domésticos— y que no habrá indemnización a las empresas privadas que resulten afectadas con esta medida.
En la conferencia de prensa matutina —celebrada en Cuernavaca, Morelos— López Obrador indicó que ya se está llevando a cabo el debate final de la iniciativa en la Cámara de Diputados.
“Creo yo que es necesaria esta reforma a la Constitución para fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad porque, anteriormente, durante el periodo neoliberal se buscó debilitar, destruir, aunque suene fuerte” a la empresa. “Todo esto, para privatizar la industria eléctrica y darle el negocio de la venta de la energía eléctrica a las empresas, tanto nacionales como extranjeras”, expuso.
“Ya la semana que viene empiezan los debates y es probable que, a mediados de abril, antes de semana santa, ya deben estar votando en la Cámara de Diputados. El periodo de sesiones normal, ordinario, creo que termina a finales de abril y esta reforma tiene que ser aprobada por las dos cámaras. O sea que, antes de que termine abril, ya sabemos”, sostuvo.
Al mandatario se le preguntó sobre las afectaciones que tendrían las empresas cuyos contratos de autoabastecimiento fueran eventualmente cancelados y advirtió que “eso va a resolverse una vez que se apruebe (la reforma). Mi propuesta es que se considere la iniciativa como la presentamos, que no haya modificaciones; sobre todo en la fundamental”.
También se le preguntó sobre el costo que tendría la cancelación de los contratos, en el caso de que los generadores privados acudieran a péneles internacionales.
Respondió que las supuestas pérdidas millonarias “es lo que sostienen los que mantienen privilegios ahora, porque reciben subsidios, y no quieren perder los privilegios”.
“No hay pérdida. Al contrario, gana el pueblo de México. Y cualquier diputado, cualquier senador, cualquier legislador debería estar pensando en lo que le conviene al pueblo”, subrayó.
Recordó que, en la misma iniciativa, se les garantiza hasta el 46% del mercado de generación eléctrica nacional, mientras que la CFE mantendrá el 54 por ciento.
“¿Cuánto es el 46%?”, se cuestionó él mismo. “Es todo lo que consume Argentina”.
Por Raúl Castro-Lebrija