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La digitalización ha llegado para revolucionar sociedades enteras. Los expertos aseguran que el futuro se pagará con moneda digital y muchos asumen que el periodo para que este cambio se concrete, tiene como fecha límite en 2030.
Desde 2016 países de la eurozona que, como Dinamarca habían apostado por la supresión del efectivo, han marcado como fecha límite el año 2030 para poder “erradicar el dinero en efectivo” y poder dar el salto definitivo a un mundo de pagos completamente digitalizado.
Sin esperarlo, con la llegada de la pandemia se ha agilizado todavía más el cambio de hábitos y costumbres de consumo por lo que, según Ricardo Morales Pelagio, académico de la Facultad de Contaduría y Administración (FCA) de la UNAM, la transición hacia esta modalidad ocurrirá mucho más rápido de lo que se pensaba.
Recordó que instituciones y empresas han tenido que implementar la digitalización a marchas forzadas. Los cambios que se esperaba que ocurrieran en 10 o 15 años se realizaron en uno o dos años, lo que ha generado un cambio sustancial en los hábitos de consumo de sociedades enteras.
Sin embargo, el experto en finanzas corporativas y eficiencia de mercados aseguró que el dinero digital no sustituirá totalmente el dinero físico. Esto se debe a que hay una gran cantidad de países que, como México, cuentan con una economía informal robusta. Además, un amplio sector de la población carece de acceso a la digitalización, por lo que en nuestra economía se mantendrá en gran medida el uso de billetes y moneda física.
Acotó a su vez que la inclusión financiera en México no es muy amplia, y mucho menos la digital-tecnificada, por lo que esta situación va a atrasar la sustitución de la moneda frente a otras economías que se encuentren mejor tecnificadas.
Dicho esto, afirmó que en este contexto es de vital importancia contar con capacidad tecnológica, infraestructura y desarrollar sin lugar a dudas una mayor capacitación en temas de educación y cultura financiera, lo que representa los principales retos a enfrentar en nuestro país.
Además, para eliminar el efectivo se debe primero implementar una legislación oportuna de manera gradual que permita acotar el uso correcto del dinero digital y lograr a su vez tapar las irregularidades de los tres tipos de moneda digital existentes: las criptomonedas (sin respaldo); stablecoins (estables, emitidas por instituciones bancarias) y virtuales (amparadas por bancos centrales).
El integrante de la División de Investigación de la FCA expuso que hace unas semanas el Banco de México se pronunció por la inclusión de una moneda digital en nuestro país, se trata del peso, como moneda de curso legal, “pero ya no en papel moneda, ya no físico, sino digital”.
“No es que se vaya a emitir una criptomoneda, o un stablecoin, sino una moneda digital, es decir, podría emitir dinero, pero no lo haría físicamente en papel, lo hará de forma digital, algo que otros bancos centrales del mundo ya han considerado”, dijo.
Sin embargo, todavía queda un largo tramo que recorrer para alcanzar una digitalización total y construir un sistema de pagos incusivo que posibilite aprovechar las ventajas que brindan la tecnología blockchain y el fin del efectivo.
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