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Los datos de inflación de junio en Estados Unidos colocaron a la influyente Reserva Federal de Estados Unidos (FED) en una de sus mayores disyuntivas y pusieron contra la pared el ánimo de los inversionistas en los mercados financieros alrededor del mundo, cuando una marcada volatilidad empezaba a ceder al inicio del segundo tramo de 2021.
En México, el peso se depreciaba el martes 0.75%, en 20.03 unidades por dólar en tanto que la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) caía 382.22 unidades, con un 0.77% menos respecto a su apertura, colocando a su indicador referencial en los 49,406.90 puntos.
Expertos habían estado discutiendo que la carrera inflacionaria en la primera economía del mundo colocaba a la FED en la disyuntiva de empezar a subir tasas, aunque de manera paulatina, o esperar un mejor desempeño de indicadores como el empleo para hacerlo.
Esto implicaría cortar los apoyos por 120,000 millones de dólares que mes con mes recibe la economía estadounidense como estímulo para su reactivación.
Puede que ahora el panorama esté más claro en el sentido que el Banco Central de EU abra la posibilidad de comenzar a subir las tasas de interés en forma moderada desde este mismo año.
“La publicación del dato de junio cimbra el panorama de estabilidad que empezaba a asentarse en los mercados. Similar a lo acontecido en México, pensamos que será inevitable que los miembros de la Fed reconozcan una desviación significativa en términos de duración y magnitud respecto al escenario base para la inflación”, dijo hoy en un escrito el grupo financiero Monex.
Operadores del mercado de cambios indicaron que el peso encontró resistencia en niveles de 20.05 unidades por dólar, por lo que estiman que los rangos durante la jornada del martes oscilen entre las 19.80 y los 20.10 unidades por dólar.
u avance (+0.3%Tras conocerse el dato de inflación, el rendimiento del Bono del Tesoro a 10 años en EU revertía sus bajas matinales y avanzaba en 2 puntos base, en niveles de 1.39 por ciento.
El índice de precios al consumidor en Estados Unidos vio un aumento de 0.9% en junio y se elevó a 5.4% a tasa anual, su mayor nivel desde 2008, según datos del Departamento del Trabajo publicados el martes.
Las cifras de inflación del sexto mes del año resultaron casi del doble de lo esperado, con una inflación subyacente con su mayor avance desde 1991, impulsada por el alza de los precios de los autos y camiones usados.
La primera economía del mundo consigna que en la medida que los confinamientos se han reducido y la demanda se expande con fuerza, la oferta aún enfrenta una severa escasez de materia primas y mano de obra, presionando los precios de bienes y servicios al alza.
