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Los servicios de telecomunicaciones en AL están en manos de dos empresas: Telefónica y América Móvil-Telmex. En algunos países de la región –incluido México–, la concentración del sector supera el 90% del mercado. Los insuficientes mecanismos de regulación frenan la masificación del acceso.
Prácticamente, en todos los países de América Latina, los consorcios Telefónica y América Móvil están presentes, lo que ha llevado a especialistas en telecomunicaciones a considerarlos un “duopolio regional”. La concentración del mercado latinoamericano en estas dos empresas plantea serias preocupaciones respecto de la competencia y, en consecuencia, al desarrollo del sector de las telecomunicaciones en la región.
Judith Mariscal, Carla Bonina y Julio Luna explican en su artículo “Los nuevos escenarios de mercado en América Latina”, que forma parte del libro Pobreza digital. Perspectivas de América Latina y el Caribe, que las reformas al sector de las telecomunicaciones que se hicieron en la década de 1990 favorecieron la consolidación de estos dos operadores “con una incuestionable posición en todos los segmentos de este mercado”.
Advierten, sin embargo, que esa concentración podría derivar en prácticas oligopólicas, contrarias a la lógica del mercado, según la cual un mayor número de operadores genera una mayor competencia y ello resulta más eficiente para promover el desarrollo del sector al bajar los precios, mejorar la calidad y expandir la infraestructura.
Geografía del duopolio
De acuerdo con los investigadores, para 2004 las operaciones de la empresa de capital español Telefónica y del consorcio de América Móvil y su afiliada Telmex –propiedad del magnate mexicano Carlos Slim Helú- se extendían a 15 países de Latinoamérica; en algunos de ellos, la dupla concentraba más del 90% del mercado, como en Nicaragua (98.4), Ecuador (94.7), Colombia (90.1) y México (90.4).
En este último, la preponderancia de América Móvil-Telmex (que alcanza el 75% del mercado nacional) fue favorecida por la privatización que a comienzos de la década de 1990 tuvo la empresa estatal Teléfonos de México (Telmex) a favor de Slim Helú.
El interés de América Móvil-Telmex en el mercado latinoamericano comenzó a partir de la segunda mitad de la década 1990, lo mismo con la adquisición de compañías privatizadas de telefonía fija en Guatemala, El Salvador y Nicaragua, o a través de la expansión de sus operaciones de telefonía celular hacia países de América del Sur.
Para 2005, había adquirido empresas en Brasil, Chile, Colombia, Honduras, Nicaragua y Venezuela. Actualmente, América Móvil-Telmex domina los mercados de telefonía fija y celular, así como de servicios de banda ancha, en México y Centroamérica.
La firma española Telefónica tiene presencia sobre todo en los países del Cono Sur, debido a que adquirió empresas con poder de mercado y con periodos de exclusividad en Argentina, Brasil, Chile y Perú, los que, sumidos en crisis fiscales, favorecieron los ingresos en detrimento de la creación de un ambiente de competencia. Ello dotó a Telefónica de un mercado exclusivo en América Latina, mucho más alto que el mercado español, a decir de los especialistas.
En años recientes, la compañía española ha continuado con una “agresiva política de expansión”, cuya adquisición más importante ha sido la concesión en Brasil de telefonía fija local, lo que le ha llevado a controlar un tercio de las líneas del país más grande de América Latina. Pero el dominio de Telefónica en los mercados de telefonía fija y celular y banda ancha no existe únicamente en el país carioca, sino también en Argentina, Chile, Perú y Venezuela.
No obstante, persisten en la región amplios segmentos de la sociedad que no cuentan con acceso a los servicios básicos de telecomunicaciones, como la telefonía fija. De acuerdo con datos del Observatorio para la Sociedad de la Información en Latinoamérica y el Caribe (Osilac), Uruguay y Costa Rica son los únicos países en donde más de la mitad de los hogares cuenta con línea telefónica fija (69.9 y 65.6%, respectivamente). En Paraguay, Bolivia y Cuba, el servicio no llega ni a 20% de los hogares.
Telefonía móvil, un nicho en disputa
El texto de Mariscal, Bonina y Luna señala que, de 2000 a 2003, el crecimiento regional de la telefonía fija fue de apenas 7 puntos porcentuales, mientras que el número de usuarios de telefonía móvil aumentó en promedio 33% anualmente durante dicho periodo.
Ello fue en parte favorecido por su penetración en los sectores de escasos recursos, para quienes la telefonía móvil se ha convertido en el principal medio de acceso a las telecomunicaciones.
Pero no han sido los únicos atraídos por dicho servicio. Los dos grandes operadores que controlan la región también han fijado su atención en la telefonía móvil, lo que los ha llevado a entablar una “agresiva” campaña de atracción de clientes y -lo que es más- a la “depredación de los mercados locales en una lucha por el posicionamiento regional”, apuntan los investigadores.
No obstante, la pelea por el mercado no se ha traducido en una oferta que llegue a prácticamente toda la población, situación que se advierte en las cifras del Osilac. De acuerdo con el organismo regional, el país donde más usuarios de telefonía móvil existen es Panamá, con 64.2% de su población, al que le siguen Ecuador (63.8%) y Brasil (59.2%). Lo anterior significa que, incluso en los países donde la telefonía móvil ha logrado expandirse más, aún persiste un tercio de la población que no tiene acceso a este tipo de tecnología.
Duopolio, sin competencia ni regulación
Carlos Elizondo Mayer-Sierra, profesor de la división de Estudios Políticos del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), explica que el riesgo de que exista un duopolio es que tiende a elevar el precio de los productos y a bajar la calidad de éstos, impactando inmediatamente en quienes menos recursos tienen, ya que son quienes carecerán de vehículos de acceso a las tecnologías de información y comunicación.
En opinión del doctor en ciencia política, lo que hace falta es reducir las barreras económicas y sociales que impiden que más actores entren al mercado de las telecomunicaciones, pues con ello se fomentaría un escenario de competencia que derivaría en mejores condiciones de mercado.
Una investigación realizada en junio del año pasado por la Asociación para el Progreso de las Comunicaciones, auspiciada por el Centro Internacional de Investigación para el Desarrollo, advierte que paralelo a la generación de competencia en el ámbito de las telecomunicaciones, se requiere que el Estado establezca políticas y regulaciones, lo cual “no es tarea fácil en países donde el papel de los gobiernos ha demostrado en diversas oportunidades no estar a la altura de las circunstancias para impulsar el desarrollo de las telecomunicaciones”.
Lo anterior se debe a que en los países en desarrollo –como es el caso latinoamericano–, los reguladores, si es que existen, tienden a ser débiles, carecen de independencia institucional, jurídica o política, no poseen competencias técnicas suficientes y son parte de un sistema de influencias cruzadas entre operadores del sector público y privado, explica el documento, titulado La regulación de las telecomunicaciones y el desarrollo de la banda ancha. Implicancias para la región andina.
Mariscal, Bonina y Luna reflexionan acerca de las implicaciones que han tenido en la región las reformas en el área de las telecomunicaciones, pues reconocen que han tenido el “inesperado” resultado de fomentar el duopolio entre Telefónica y América Móvil-Telmex.
“La realidad nos enfrenta (…) no sólo a una concentración del mercado, sino a la eminente presencia de un duopolio regional. Si bien los operadores ya se encuentran implementando estrategias corporativas en este nuevo contexto, los reguladores no parecen haber ajustado sus políticas ante dicho escenario”, concluyen.
Concentración de mercado de América Móvil-Telmex y Telefónica
País |
América Móvil-Telmex |
Telefónica |
% concentración |
Nicaragua |
58.1 |
40.4 |
98.4 |
Ecuador |
63.9 |
30.8 |
94.7 |
México |
75.6 |
14.8 |
90.4 |
Colombia |
57.5 |
32.6 |
90.1 |
Brasil |
25.6 |
49.8 |
75.5 |
Panamá |
— |
73.1 |
73.1 |
Guatemala |
45.6 |
26.2 |
71.8 |
El Salvador |
32.2 |
23.9 |
56.1 |
Argentina |
27.8 |
26.1 |
53.8 |
Perú |
— |
51.9 |
51.9 |
Venezuela |
— |
45.7 |
45.7 |
Uruguay |
1 |
35.6 |
36.6 |
Chile |
— |
35.1 |
35.1 |
Honduras |
28.3 |
— |
28.3 |
Fuente: Telecom-CIDE