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El mapa político del mundo cambió por completo con la victoria de Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos. En ese contexto, un mandatario está más preocupado que el resto…
Donald Trump es el nuevo presidente de Estados Unidos. Asumirá en enero y con ello, el clima político mundial cambia por completo porque ahora el panorama es otro y todo deberá acomodarse. El triunfo del republicano tensionó a varios mandatarios entre los que se encuentran Claudia Sheinbaum, Nicolás Maduro, Vladimir Putin, Volodomir Zelenski y parte de la Unión Europea, como Pedro Sánchez. Sin embargo, quien ingresó en una fase crítica fue Lula Da Silva.
“Para nosotros, la victoria de Kamala en las elecciones es mucho más segura para fortalecer la democracia en Estados Unidos”, había afirmado Lula en una entrevista a la cadena de televisión francesa TF1, antes de las elecciones presidenciales. La derrota de su candidata fue brutal y no le quedó más opción que felicitar a Trump: “Mis felicitaciones al presidente Donald Trump por su victoria electoral y su regreso a la presidencia de Estados Unidos. La democracia es la voz del pueblo y siempre debe ser respetada. El mundo necesita diálogo y trabajar juntos para tener más paz, desarrollo y prosperidad. Deseo suerte y éxito al nuevo gobierno”.
El punto es que Lula entiende que el regreso de Trump es un dolor de cabeza para su gestión. Trump buscará potenciar la imagen de Jair Bolsonaro, que se presentaría como candidato nuevamente. Y como si fuese poco, Elon Musk tomó un protagonismo absoluto en este ciclo de Trump. El millonario viene de pelearse fuertemente con Lula hace unos meses y ahora Musk es uno de las personalidades más poderosas es influyentes del mundo.
Luego del triunfo de Trump, Lula se mostró nervioso en una entrevista con CNN: “Creo que el presidente Trump tiene que pensar como un habitante del Planeta Tierra. Y si piensa como el gobernante del país más importante y más rico del mundo, que tiene más tecnología y está mejor preparado militarmente, debe ser consciente de que Estados Unidos está en el mismo planeta que yo. Lo único que queremos es que Musk trate a los países con respeto y que no use fake news para informar a la gente, tanto estadounidense como brasileña”.
Desde que el republicano ganó las elecciones, la tensión cambiaria se notó en Brasil y el real volvió a dar un salto importante con el dólar, rozando los 5.8 reales por cada dólar. En lo que va del 2024, el real se devaluó un 13 por ciento: el año pasado u$s100 equivalían a 503 reales, hoy ese monto es igual a 580 reales.
En Brasil entienden que la llegada de Trump al poder provocará un fortalecimiento del dólar porque él asegura que va a subir los aranceles y aplicar una política más proteccionista. Además, Brasil se encuentra en un proceso que lo obligará a corregir distorsiones fiscales, algo que se traducen en presión sobre el tipo de cambio.
Por último, Trump no olvida que Lula es cercano a Putin, celebró el triunfo de Sheinbaum y apoyó a Nicolás Maduro en la campaña electoral. La cercanía de Trump y Bolsonaro termina distanciando fuertemente al republicano de Lula. La tensión está en el aire. Lula deberá encontrar oxígeno en momentos de turbulencia política, aunque nada podrá cambiar sus últimas decisiones, que por cierto, no coincide en ninguna con Trump…
