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“Podrían avecinarse tiempos oscuros para toda América del Norte si se permite que este ataque a la democracia continúe sin oposición”, advierte.
The Wilson Center —centro de investigación en asuntos internacionales con sede en Washington— consideró que la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador representa una traición a cuatro décadas de avances en la democracia mexicana.
Esta es la conclusión a la que llega un artículo denominado Desenmascarando la toma de poder: cómo la reforma propuesta por México amenaza la democracia, elaborado por Alejandro García Magos, profesor de la Universidad de Toronto, y publicado en la revista semanal digital de The Wilson Center.
En su artículo, el académico asegura que “si esta reforma se aprueba, representaría una regresión significativa en el desarrollo democrático de México”.
La reforma “señalaría un regreso a un pasado en el que los resultados electorales eran predecibles, no por la voluntad del pueblo, sino por la manipulación del proceso electoral por parte de quienes estaban en el poder”.
“Esto sería una traición a los principios democráticos que se han construido laboriosamente durante las últimas cuatro décadas. Hay mucho en juego y las implicaciones de esta supuesta reforma son graves”, insiste el artículo de García Magos.
La reforma judicial, que será votada el miércoles por la Cámara de Senadores, sería “un retroceso en la gobernanza democrática de México, podría tensar las relaciones entre Estados Unidos y México, perturbar la estabilidad regional y desafiar el compromiso compartido con los valores democráticos que sustentan la cooperación entre las dos naciones”.
Adicionalmente, ante una posible aprobación de la reforma, “podrían avecinarse tiempos oscuros para toda América del Norte si se permite que este ataque a la democracia continúe sin oposición”.
“Esta no es una reforma constitucional”, concluye el artículo publicado en el sitio de The Wilson Center.
“Se trata de un ataque a la constitución y una flagrante toma de poder, una medida que es más probable que se vea en una república bananera que en un país serio como México”, finaliza.
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