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El presidente de la Fed de Chicago aseveró que si la inflación viene “un poco mayor” por unos meses, el trayecto es el correcto para alcanzar el objetivo, por lo que no es partidario de esperar una base 12 meses en el objetivo de 2% para empezar a recortar las tasas
La senda de la Reserva Federal de alcanzar su objetivo del 2% de inflación seguiría por buen camino incluso si el alza de precios fuera mayor a lo esperado en los próximos meses, y el banco central debería ser cauteloso a la hora de esperar demasiado tiempo antes de recortar las tasas, dijo el presidente de la Fed de Chicago.
“Incluso si la inflación viene un poco mayor por unos meses (…) seguiría siendo coherente con nuestra senda de vuelta al objetivo”, dijo el miércoles Austan Goolsbee en un discurso preparado ante el Consejo de Relaciones Exteriores en Nueva York.
“No soy partidario de esperar hasta que la inflación sobre una base de 12 meses haya alcanzado ya el 2% para empezar a recortar las tasas”.
La Fed mantuvo en enero el costo del crédito sin cambios en el rango del 5.25% al 5.50%, donde se ha mantenido desde julio, mientras busca más confianza en que el ritmo anual de aumento de los precios se encuentra en una senda sostenible hacia el 2%.
Los precios al consumidor en Estados Unidos subieron más de lo previsto en enero, mostraron el martes datos del Gobierno, en medio de un aumento del costo de los alquileres de viviendas.
Como resultado, los operadores apuestan a que la Fed esperará hasta junio para empezar a reducir las tasas, y ahora prevén tres recortes de un cuarto de punto para finales de año, en línea con lo que la Fed proyectó en diciembre, pero menos que las cuatro o más reducciones que los mercados habían pronosticado a principios de semana.
Goolsbee dijo que la inflación de los servicios inmobiliarios estaba “en desacuerdo” con los datos del mercado sobre los nuevos arrendamientos y que, aunque espera que las presiones sobre los precios vuelvan a disminuir, los datos del martes significaban que el “rompecabezas se hacía más grande (…) y es algo que estoy vigilando”.
También señaló que en los últimos siete meses el indicador de inflación subyacente de los gastos de consumo personal, que la Fed también sigue de cerca y que elimina los volátiles precios de los alimentos y la energía, se ha situado en el objetivo del 2% del organismo o incluso por debajo.
“Los recortes de tasas deberían estar ligados a la confianza en estar en la senda hacia el objetivo”, dijo Goolsbee. “Creo que merece la pena reconocer que, si seguimos siendo tan restrictivos durante demasiado tiempo, empezaremos a tener que preocuparnos por el lado del empleo del mandato de la Fed”.