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La firma asiática arriba a suelo nacional con dos productos.
El auge de armadoras chinas en México prevalece, esta vez con la llegada oficial del Geely, que pertenece a un fuerte consorcio automotriz. A nuestro país llega con sus dos primeros vehículos, ambos SUVs con enfoques diferentes.
El primero de los modelos para nuestro mercado es el Geometry C, una SUV totalmente eléctrica que se coloca de manera atractiva, no sólo por diseño, también por un rendimiento que luce prometedor y competitivo.
Este vehículo tendrá un sólo motor con una batería de 70 kWh, suficiente para el desarrollo de 201 caballos de fuerza y 228 lb-pie de par. El conjunto, según el fabricante, alcanza para una autonomía por carga de hasta 485 kilómetros.
Al interior se encuentran amenidades como una pantalla de 12.3 pulgadas, iluminación Full LED, asientos de cuero sintético, ajustes eléctricos y más, incluyendo un esquema de seguridad con 6 bolsas de aire y ADAS nivel 2.
En territorio mexicano el Geometry C se venderá en dos versiones: GL, con precio de 788,888 pesos y GF, con una etiqueta de 848,888 pesos.
La segunda alternativa es el nuevo Coolray, un SUV del segmento B que tiene una propuesta con tintes agrsivos y deportivos, con rasgos angulares, iluminación LED completa y algunos detalles aerodinámicos y en tonos contrastantes.
El conjunto mecánico de este producto se conformará por un motor de cuatro cilindros de 1.5 litros de desplazamiento con turbocompresor integrado, capaz de entregar 172 caballos de fuerza, ademá de una transmisión automática de doble embrague de 7 velocidades.
El esquema del interior y de seguridad será muy similar al del SUV eléctrico, con una pantalla e iluminación de el mismo tipo, además de las mismas 6 bolsas de aira y asistencias de seguridad, como el mintor de punto ciego, la alerta de tráfico cruzado, entre otras.
Los precios del Coolray son: GC: 439,888 pesos, GL: 459,888 pesos, GF: 509,888 pesos y GF Pack, con un precio de 524,888 pesos.
Geely ofrece una garantía de 5 años o 150,000 kilómetros defensa a defensa y de 8 años o o 150,000 kilómetros en componentes de batería para la opción eléctrica o de 8 años o 250,000 kilómetros para motor y transmisión en la variante con motor de combustión interna.