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El compacto crece y se acerca al segmento C, con más equipo y espacio.
Los segmentos de entrada suelen estar representados por opciones atractivas y asequibles y Kia le dio la vuelta a esta idea con el lanzamiento del nuevo K3. El sedán pronto comenzará a venderse en México con una interesante propuesta de diseño, una mayor amplitud y una seguridad envidiable.
El sucesor natural del Río adopta una cara nueva, con grupos ópticos verticales, trazos fuertes, una parrilla “tiger nose” de dimensiones contenidas y una carrocería que emula a un fastback, aunado a una forma de luces traseras corridas, entre lo más destacado.
La cabina cuenta con un entorno moderno y tecnológico, con una pantalla central de 10.25 pulgadas y un nuevo panel de instrumentos digital, así como a amenidades, como: cargador inalámbrico; conexión Android Auto y Apple CarPlay sin cables; climatizador digital; iluminación ambiental, etc.
En cuanto a motores, el nuevo K3 hará uso del bloque de 1.6 litros heredados del Río, con 121 caballos de fuerza, con 111 lb-pie y caja manual o automática, en ambos casos de seis velocidades. Una opción tope llevará un 2.0 litros de 150 caballos de fuerza, únicamente elegible con la transmisión automática de seis marchas.
La seguridad desde la versión base incluye seis bolsas de aire, control electrónico de estabilidad y frenos ABS, con la posibilidad de alcanzar a incluir ADAS, como: alerta de colisión frontal, monitor de punto ciego, alerta de tráfico trasero, cambio de luces automático, entre otros.
Siete son las versiones que comenzarán a venderse en preventa el próximo 6 de octubre y de manera libre el 19 de octubre de este mismo año.
