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Recientemente, Fitch rebajó la calificación de la petrolera un peldaño menos del grado especulativo en el que la colocó a principios de 2020, resultado de un desempeño operativo débil y necesidades de financiamiento significativas
La calificadora internacional Fitch Ratings alertó el miércoles que si el gobierno mexicano aumenta “sustancialmente” su apoyo a Petróleos Mexicanos (Pemex) tendría “un efecto crediticio negativo en el soberano”.
La agencia de riesgos crediticios mantiene un caso base que contempla que si bien el Gobierno mexicano continuará apoyando financieramente a Pemex, no garantizará la deuda de la empresa.
Tampoco proporcionará una inyección de capital que mejore materialmente su posición financiera.
Bajo este criterio, México sostendrá una calificación de “BBB-“ y una Perspectiva Estable, reafirmada apenas en junio pasado.
“Sin embargo, si el gobierno aumentara sustancialmente su apoyo a Pemex hasta el punto de que resulte en mayores déficits y un aumento sostenido en la relación entre la deuda del gobierno general y el PIB, tendría un efecto crediticio negativo en el soberano”, dice un comunicado de la agencia fechado en Nueva York.
Recién en julio, Fitch rebajó a “B+” la calificación de Pemex, un peldaño menos del grado especulativo en el que lo colocó a principios de 2020.
El ajuste reflejó un desempeño operativo débil y persistente en la petrolera, necesidades de financiamiento significativas y una creciente incertidumbre sobre la voluntad del Gobierno de apoyarla.
Además, la petrolera más endeudada del mundo, con un pasivo de más de 105,000 millones de dólares, tiene una débil posición de liquidez para solventar sus obligaciones y una lánguida estructura de capital.
La calificación de México trata a Pemex como un pasivo contingente para el Soberano y esto se refleja en un nivel negativo.
“Si bien asumimos que el apoyo soberano a Pemex continuará, la legislación establece explícitamente que la deuda de Pemex no constituye una obligación garantizada por el gobierno y restringe que el gobierno garantice la deuda”, anotó Fitch.
De 15,000 mdd anuales
El caso base de Fitch para Pemex involucra apoyos por parte del Gobierno mexicano por alrededor de 15,000 millones de dólares (mdd) por año.
Esta cantidad cubrirá como mínimo las amortizaciones de la deuda de bonos internacionales de la compañía.
Para Fitch, un apoyo más allá no sería “necesariamente negativo” para el perfil crediticio.
El impacto en el perfil de crédito soberano dependería de cómo el gobierno se adapte fiscalmente al apoyo adicional, agregó.
“Sin embargo, sería negativo para el crédito si el apoyo adicional da como resultado un cambio en las prioridades fiscales del gobierno”, de mantener un déficit moderado y una relación deuda/PIB estable.
A su vez, un cambio de decisión en este sentido conduciría además a un aumento en la trayectoria de la deuda pública de México en el largo plazo.