Una vida sin fronteras entre los átomos y los bits

Tiempo de lectura aprox: 4 minutos, 24 segundos

La tecnología hace que todo evolucione a un ritmo acelerado y provoca que los diferentes sectores productivos se encuentren en una constante de cambio para enfrentar los problemas y buscar soluciones acorde a los tiempos que estamos viviendo. A veces nos da la impresión que cada día que despertamos el mundo es muy diferente al que dejamos antes de irnos a la cama.

Mtro. Juan Carlos Zepeda *

Y una buena referencia de ello está en el reporte “Technology Vision 2023: Los cimientos de nuestra nueva realidad”, de Accenture, en donde se comparten las tendencias tecnológicas de cada año. Hoy los líderes deben entender cómo nuestras industrias fueron o están siendo impactadas, para bien o para mal, por las revoluciones tecnológicas.

El documento presenta cuatro tendencias que están cambiando al mundo: Identidad Digital; Tus datos, mis datos, nuestros datos; Inteligencia Artificial Generativa y Nuestra última frontera. A éstas las cataloga como las bases de nuestra nueva realidad, una realidad formada por átomos (porque somos seres vivos) y por bits (por la tecnología que nos rodea).

Destaca sobre todo la importancia que tiene la fusión de lo digital con lo físico, siendo el camino hacia nuevas (y casi infinitas) posibilidades. El estudio señala que “aunque hay quien ve el metaverso como la culminación de la última oleada de disrupción digital, conviene verlo más bien como el principio de la siguiente. El metaverso marca un antes y un después en la convergencia de átomos y bits, ya que acelera la evolución hacia una realidad mixta. Utilizamos el continuo del metaverso para hacer que el mundo digital se parezca más al físico, al tiempo que aplicamos tecnologías del metaverso para transformar lo que hacemos en el mundo físico. Es el nexo de unión entre lo digital y lo físico lo que explica que algunas de las aplicaciones más potentes del universo sirvan también para fusionar ambos mundos.”

Identidad Digital. Básicamente se refiere a la información y características que definen a una persona o entidad en el entorno digital. La convergencia entre lo físico y lo digital solo será posible si personas y cosas tienen una identidad que sea válida en ambos mundos. Entonces, en esta área se busca que las empresas logren alcanzar objetivos tecnológicos muy ambiciosos, poniendo el tema como prioritario en su agenda de innovación.

Tus datos, Mis datos, Nuestros datos. No hay que olvidar que “los datos son de todos”, por lo que las empresas que quieran liderar en las futuras tendencias tecnológicas deberán tener como pilar fundamental la transparencia. En este capítulo se expone que la oferta y la demanda de datos está creciendo a un ritmo sin precedente. Hoy en día creer algo que se comunicó de boca en boca va en declive; la gente ya no cree en todo lo que escucha, pregunta por las fuentes y por los datos, y está muy influenciada por la información digital. “Las empresas deben cambiar su mentalidad para adoptar la transparencia, revisar cómo calculan el riesgo y pensar de manera multidimensional sobre el valor de sus datos”.

El apartado de Inteligencia Artificial Generativa nos recuerda que en esta nueva realidad ya no participarán solo los humanos, sino también las máquinas. Algo que ya millones de personas están presenciando con softwares como el ChatGPT. ¿Actualmente ya podemos imaginarnos cómo será la Inteligencia Artificial de nueva generación? Creo que no, que incluso los escenarios más ambiciosos pueden quedarse cortos. Estos nuevos desarrollos nos dan una clara idea de que cualquier frontera conceptual puede ser borrada, llegando a límites que antes parecían, si no imposibles, sí muy lejanos.

Y justo aquí entramos a la cuarta: Nuestra última frontera, donde la revolución científico-tecnológica empujará los límites de lo posible. Las empresas buscarán y les darán más importancia a sus respectivos esfuerzos de innovación. Los nuevos avances tecnológicos impulsarán movimientos científicos en materiales, energía, tierra, espacio y biología sintética.

En este contexto, es importante ver lo que las grandes universidades de todo el mundo están haciendo, siendo parte del ecosistema del desarrollo tecnológico presente y futuro y en donde las nuevas generaciones se están formando. Hoy en día cuentan con sus departamentos especializados en el estudio de las tendencias tecnológicas y cómo éstas afectarán y modificarán la vida como la conocemos. Por ejemplo, la Universidad de Oxford de la mano con el Instituto Reuters, establece que en este 2023 una de las tendencias y predicciones para el periodismo y medios de comunicación será que los editores presten mayor atención a plataformas como TikTok e Instagram, dejando atrás las ‘tradicionales redes sociales’, algo que ya es sumamente claro.

También, se buscará invertir mayores recursos en contar historias por nuevos medios, como lo son el podcast y el audio digital, algo que también ya es más visible en nuestra actualidad.

La Universidad de Oxford también predice la Inteligencia Artificial y su aplicación en el periodismo. Afirma que en este año seguirán saliendo a la luz muchas más herramientas con Inteligencia Artificial (más allá del ChatGPT) y la penetración será mayor. Por ejemplo, predice que las empresas de radiodifusión adoptarán a los presentadores virtuales. Recientemente Radio Formula presentó a NAT, “la primera presentadora de noticias creada con Inteligencia Artificial”, un paso interesante en los medios de comunicación mexicanos. ¿Qué pasará con los presentadores de noticias…humanos?

Por su parte, la Universidad de Cambridge nos recuerda que la Inteligencia Artificial no solamente tendrá un fuerte impacto en el periodismo y en los medios de comunicación, sino también en la educación. Por ejemplo, se espera que en este año haya un incremento sustancial en el correcto uso de la IA en herramientas educativas y de evaluación. También se ha hablado mucho que esta tecnología “va a reemplazar a los maestros”, aunque para la esta escuela será todo lo contrario, siendo la tecnología la que apoye a los maestros, no a reemplazarlos”.

También la IA podrá brindar mayores experiencias inmersivas a los estudiantes. Por ejemplo, los alumnos de medicina podrán ponerse unos visores y visualizar órganos, sistemas y tejidos en tercera dimensión y aprender anatomía a través de una manera innovadora y vanguardista, algo que por cierto ya se está implementado en algunas universidades de nuestro país.

Ante este panorama, ¿qué opinan las personas comunes y corrientes acerca de la IA? Stanford presentó un estudio donde, por ejemplo, los ciudadanos chinos (78%), sauditas (76%), indios (71%), peruanos (70%) y mexicanos (65%) son los que más estuvieron de acuerdo con la afirmación de que los productos y servicios que utilizan IA tienen más ventajas que inconvenientes. Mientras que los franceses (31%), canadienses (32%), holandeses (33%), estadounidenses (35%) y alemanes (37%) rechazan más su uso o tienen dudas sobre los benficios reales que les aporta.

Las personas a favor de la IA argumentan que mejorará la vida y la sociedad y ahorrará tiempo, al hacerse más eficientes. Mientras que los que la cuestionan dicen que se preocupan por la pérdida de empleos, la vigilancia, la piratería, la privacidad digital y la falta de conexión humana. Todo un debate.

¿Qué cambios tecnológicos podemos esperar en cinco, diez, veinte o cincuenta años? ¿Cómo será el mundo? ¿Cómo realizaremos nuestro trabajo? ¿Nos reemplazarán las máquinas como en aquellas películas futuristas tipo “Wall-E” (2008) o nos enamoráremos de nuestra Inteligencia Artificial como en “Her” (2013)?

La verdad es que no tenemos una respuesta clara del alcance de todos los cambios que se avecinan. Pero lo que sí sabemos, es que los líderes en las organizaciones, sin importar el sector o especialidad, deben guiar estos procesos de conciencia, investigación y desarrollo con base en las nuevas y futuras tecnologías, en donde el mundo físico y el digital ya no tendrán una frontera tan clara como hoy, todavía, la percibimos

Mtro. Juan Carlos Zepeda
jczepeda@fwd.com.mx
Socio Director de FWD Consultores.
Consejero de Reputation Digital Institute (RDI)