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De acuerdo con un estudio de la institución financiera, existen 126 municipios donde Finabien no tiene presencia, por lo que los usuarios tendrían que desplazarse para cobrar los recursos enviados desde Estados Unidos.
De acuerdo con un estudio de BBVA Research, la Financiera para el Bienestar (Finabien) no tiene la presencia suficiente para pagar las remesas que envían los mexicanos desde Estados Unidos.
En el estudio, la institución financiera recordó que las remesas enviadas a México acumulan una racha de 35 meses consecutivos con incrementos. Solo en marzo pasado, los envíos sumaron 5,194 millones de dólares, lo que representa un incremento de 10.7% en términos anuales.
También recordó que el Banco del Bienestar recientemente anunció su intención de retirarse del servicio de pago de remesas en 1,379 municipios del país.
“Estimamos que en 928 de estos municipios (67%) Financiera para el Bienestar tiene sucursal, por lo que podría atender a las personas que recibían remesas”, advirtió.
Sin embargo “en otros 325 municipios (24%), Financiera para el Bienestar no tiene presencia”, por lo que “los receptores de remesas podrían transitar a una sucursal bancaria, corresponsal o tienda comercial”-
Pero, peor aún, en 126 municipios (9%) se estima que la Finabien “no cuenta con otro punto de pago, por lo que los receptores de remesas tendrían que incurrir en gastos adicionales de traslado a otro municipio”.
Financiera para el Bienestar “no es una institución bancaria. En su catálogo de servicios se encuentran las de: expedición de telegramas, corresponsalía bancaria, transferencias de dinero (remesas nacionales), pago en efectivo de programas sociales, entrega de remesas internacionales, y cobro de servicios de empresas y gubernamentales”.
Al segundo trimestre de 2022, Financiera para el Bienestar contaba con 1,732 sucursales con presencia en 1,213 municipios en la república mexicana (49.0% del total) y con una cobertura de atención de 87.5% de la población adulta en el país.
Finalmente, BBVA Research señaló que “los usuarios y clientes del Banco del Bienestar eligieron a esa institución como su mejor opción para el cobro de sus remesas, ya sea por el costo del envío de dinero, por comodidad, por sus servicios, por la atención de sus ejecutivos, por su proximidad geográfica, entre otros. Es decir, era su opción óptima”.
“Así, los usuarios y clientes transitarían a una situación generalmente peor, o a lo más igual, que la que tenían previo al cierre del servicio de pago de remesas por esta institución. Es decir, la salida de un proveedor de servicios generalmente conlleva afectaciones a sus clientes y usuarios, al menos en el corto plazo”, concluyó.
