Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 26 segundos
El Banco Central mexicano también disminuyó marginalmente sus expectativas de crecimiento inflacionario en tres trimestres de 2023, con excepción del tercero, cuando el nivel se mantiene en 5.35%
La Junta de Gobierno del Banco de México determinó el jueves elevar la tasa de interés de referencia en el país de 11% a 11.25%, tras promulgar que “con esta acción se reduce el ritmo de incrementos y la postura de política monetaria se ajusta a la trayectoria que se requiere para que la inflación converja a su meta de 3% dentro del horizonte de pronóstico”.
El máximo órgano de decisión de política monetaria también ajustó marginalmente sus expectativas de inflación “general y subyacente” para 2023, “aunque mantienen una trayectoria estable”.
Los riesgos al alza de las previsiones reflejan la persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados; la depreciación cambiaria ante eventos de volatilidad financiera internacional y mayores presiones de costos.
También incluyen las presiones en los precios de energéticos o agropecuarios.
Por el contrario, los riesgos a la baja son una desaceleración de la economía global mayor a la anticipada; un menor traspaso de algunas presiones de costos; una disminución en la intensidad del conflicto geopolítico en Europa del Este, o un mejor funcionamiento de las cadenas de suministro, así como un efecto mayor al previsto de las medidas del Gobierno Federal ante la carestía.
“Se considera que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se mantiene sesgado al alza”, alertó.
La expectativa de inflación general para el primero y segundo trimestres pasa de 7.7% a 7.5% y de 6.4 a 6.3% respectivamente, mientras que la del tercero se mantuvo en 5.3%; en el último trimestre, la inflación colocaría en 4.8%, desde el nivel previo de 4.9%.
El índice subyacente, esto es, aquel que marcan la tendencia de más largo plazo de los precios de mercancías y servicios, a su vez pasa de 8.2 a 8.3% en el primer trimestre de 2023; de 7.3 a 7.5% en el segundo, mientras que en el tercer y cuarto trimestres la estimación se mantiene en 6.2% y 5%.
“La Junta de Gobierno vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas.
“Ello, con el objetivo de determinar una tasa de referencia congruente en todo momento, tanto con la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3% en el plazo en el que opera la política monetaria, como con un ajuste adecuado de la economía y de los mercados financieros”, aseguró.
