Un pleito más con EU; ahora por maíz amarillo transgénico

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La Secretaría de Economía informó que ha recibido la solicitud de inicio de consultas por parte de la Oficina de Representación Comercial de Estados Unidos. El caso se suma al del sector energético que enfrenta al país con Canadá.

Al problema que enfrenta México con Canadá y Estados Unidos por la discriminación a empresas de esos países en el sector energético, se suma un conflicto más, ahora en el maíz transgénico amarillo.

Este lunes, la Secretaría de Economía informó que recibió de la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR) la solicitud para iniciar consultas técnicas “para abordar el Decreto que regula el maíz genéticamente modificado, publicado el pasado 13 de febrero en el Diario Oficial de la Federación”.

Como se recordará, ese decreto prohíbe las importaciones de maíz amarillo transgénico desde los Estados Unidos, en cuento no se tengan claros los efectos sobre la salud humana.

La postura del gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha sido permitir la importación del maíz amarillo solamente como forraje; es decir, como alimento para alimento de aves y ganado. Sin embargo, al ser consumidos por animales que sirven de alimento, terminarían en el organismo de seres humanos.

De acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), las exportaciones de maíz amarillo a México son fundamentales para Estados Unidos, ya que representan el 26% de su producción total y tienen un valor de 19,000 millones de dólares. De hecho, estados como Illinois y Iowa mandan a México 77% y 66% de su producción.

De acuerdo con la Secretaría de Economía, “este proceso se sustenta en el Capítulo 9 del T-MEC (Medidas Sanitarias y Fitosanitarias), el cual establece la posibilidad de iniciar un diálogo de carácter técnico para intercambiar información sobre la medida en cuestión”.

“Como esta secretaría lo ha señalado en reiteradas ocasiones, el objetivo del Decreto es preservar que la tortilla sea elaborada con maíz nativo, asegurando así, la conservación de la biodiversidad de las más de 64 razas de maíz que hay en el país, de las cuales 59 son endémicas”, detalló la dependencia.

Añadió que “México aprovechará este mecanismo previsto en el T-MEC para demostrar con datos y con evidencia que no ha habido afectación comercial y que, por el contrario, el Decreto es consistente con el propio Tratado”.

Las consultas en el marco del T-MEC por el maíz amarillo ahora se suman a las iniciadas por las afectaciones a las empresas de energía de Canadá y Estados Unidos, luego de las reformas implementadas por el gobierno de López Obrador.