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Luego de reconocer que no cuenta con los votos suficientes en el Congreso, planteó reformas a la ley electoral para que los consejeros sean electos por voto popular y eliminar a los legisladores plurinominales.
Luego del rechazo y las protestas en contra de su iniciativa de reforma constitucional en materia electoral, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció un “Plan B” para hacer cambios sin modificar la carta magna.
En la conferencia de prensa matutina de este martes, el presidente López Obrador reconoció que no cuenta con los votos suficientes, ni en la Cámara de Diputados ni en la Senadores, para concretar la última reforma constitucional de su gobierno.
Por este motivo, “es probable que yo envíe una reforma a la ley, que no requiere de dos terceras partes; un Plan B”.
“Es posible que, sin violar la Constitución, se pueda proponer en una ley o alguna reforma a la ley electoral; de que se elijan a los consejeros (del Instituto Nacional Electoral) y a los magistrados del Tribunal Electoral. Que sea posible que no haya plurinominales, que en vez de 500 sean 300; ver si existe, de acuerdo a lo que establece la Constitución la posibilidad de hacer una reforma”, abundó.
“Lo ideal sería la reforma constitucional”, insistió. Sin embargo, se hará “todo aquello que se pueda hacer sin violar la Constitución. Pero no dejar de luchar, porque dejar de luchar es como empezar a morir”.
Como se recordará, la esencia de la iniciativa de reforma constitucional en materia electoral es transformar al Instituto Nacional Electoral en el Instituto Naciones de Elecciones y Consultas (INEC) y que sus consejeros —así como los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial— sean electos por el voto popular.
Sin embargo, tanto consejeros como magistrados serían electos a partir de 20 candidatos presentados por el poder ejecutivo (es decir, el propio López obrador), 20 por el poder legislativo (donde Morena es mayoría) y 20 más por el poder judicial.
Además, este nuevo INEC —donde el control de López obrador sería evidente— sería el encargado de organizar todas las elecciones del país, ya ue desaparecerían los órganos electorales estatales.
También se contemplan otros puntos como eliminar a los legisladores plurinominales e implementar el voto electrónico.
Por Raúl Castro-Lebrija
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