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Según López Obrador, estas acciones garantizarán agua para los próximos ocho o diez años.
Pese a que ayer jueves se registraron las primeras lluvias, la mañana de este viernes el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto para reforzar las acciones de apoyo en contra de la sequía en el estado de Nuevo León.
En síntesis, el decreto incluye reforzar la infraestructura de acueductos y presas que surten a la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM), obras que se espera concluir hasta el 2023, así como convenios con sectores industriales que tienen agua concesionada.
Según los cálculos de López Obrador, las acciones de este decreto —cuyo contenido será dado a conocer en el transcurso del día— permitirán que la zona cuente con agua los próximos ocho o diez años.
Germán Martínez, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) explicó que la primera medida será financiar la construcción del Acueducto Cuchillo 2, para finales del 2023, que llevará agua de la Presa Cuchillo a la ZMM. Para ello, Banobras desembolsará 15,700 millones de pesos.
También se continuará la construcción de la Presa La Libertad, que también se espera concluir en el 2023. Además se continuará llevando líquido a las regiones más pobres de Monterrey a través de cerca de 150 carros tanques.
En diversas ocasiones, el presidente López Obrador señaló que las industrias cervecera y refresquera —que tienen muchos años operando e la ciudad— tendrían que reducir sus consumos de agua en favor del consumo doméstico.
Al respecto, el funcionario reconoció que el decreto incluye convenios con los sectores industriales que tienen agua concesionada, como son los ya mencionados, que van a aportar hasta 500 litros por segundo..
Durante el anuncio, celebrado en la conferencia de prensa matutina de este viernes, el presidente López Obrador reconoció que el faltante de agua en Monterrey es de aproximadamente 3,000 litros por segundo; sin embargo, con el decreto solo se podrán surtir de 1,000 a 1,500 metros por segundo.
Por ello, independientemente de las acciones anunciadas, será necesario pasar a una nueva época de planeación del desarrollo urbano nacional y no planear ya desarrollos en lugares que no se cuenta con agua.
Por Raúl Castro-Lebrija