El pulque es una bebida de dioses que debe ser revalorada

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Un grupo de amigos lanzó Conejo Blanco, pulque embotellado que se vende en Australia, Estados Unidos y pronto en Corea.

Vicente Gutiérrez

“Estamos trabajado para reivindicar al pulque y su valor. El pulque se tiene que entender como algo ancestral, no de borrachera o algo corriente. Es una bebida de baja graduación alcohólica, higiénica y sagrada de nuestra cultura que por desgracia sufrió varias prohibiciones y persecuciones durante su historia milenaria”, señaló Jorge Contreras, quien junto a Israel Landa, Jorge Ugalde (mayordomo pulquero) y Luis Omar Rincón, manejan la empresa pulquera.

Los cuatros amigos dieron a conocer el proyecto de Pulque Octli, micro empresa que produce y vende Conejo Blanco, pulque en botella.

“El pulque tiene varios nombres como: cara blanca, tlachicotón, neutre, Octli… y es el resultado de la fermentación del aguamiel. Es el líquido que sale de la planta al perforar y raspar el centro de su tronco (el mezontete) haciendo un cuenco con un raspador. Después de rasparse hay que esperar un par de horas y el Maguey “llora” sacando su jugo sagrado, el aguamiel”, explicaron.

Para estos amantes del pulque, el mensaje es revalorar las virtudes del binomio maguey-pulque y darle la importancia que tiene en nuestra cultura. El pulque que ellos comercializan viene de Hidalgo, del valle de Mezquital.

“Nuestros ancestros la tomaban. El pulque tiene 8,500 años de historia y mística prehispánica. Es darle una difusión a una bebida que también es un valioso alimento. Somos parte del renacer pulquero llevando información verdadera a las personas y un pulque de calidad que no embriaga… ¡Pone mágico!”, explicó Jorge Ugalde, mayordomo pulquero.

“La bebida no tiene que estar babosa ni oler feo, de hecho, se puede cocinar con ella, curar con flores, herbal,  frutal y tiene todo un universo de posibilidades que se debe de conocer y apreciar porque es algo muy mexicano con una gran historia”, agregó.

En Pulque Octli Conejo Blanco trabajan únicamente con el Agave Atrovirens para así poder ofrecer el “Chamaquero de Invierno”, el mejor  pulque que pueda existir.

“Es una bebida Prehispánica muy nutritiva y podríamos decir que es como un superalimento con varias propiedades anticancerígenas y regenera la flora intestinal debido a una amplia gama de probióticos, prebióticos y levaduras. También ayuda a reducir niveles de triglicéridos”, señalaron.

Conejo Blanco es pulque embotellado en México, 100% natural, sin conservadores ni azúcares procesados, cuya formula secreta hace posible que el pulque no se siga fermentando en el cuerpo y conserve muchos de sus beneficios.

Hace muchos años, los pobladores de la época veían que el conejo de monte salía del maguey y se les atribuye a los conejos el descubrimiento del aguamiel y eventualmente del pulque, por esta razón es el ícono representativo de Pulque Octli Conejo Blanco.

“La idea es acercar el pulque a la gente que no tiene acceso, si tienes una pulquería cerca pues no me compres la botella… pero hay muchos consumidores que no y creemos que lo van a disfrutar mucho pues es exquisito y nos da gusto que se comienza a tomar en nuestro país y nosotros queremos impulsar y difundir la cultura”, finalizaron.

 

La empresa tiene cinco años y ya comercializan sus botellas en el extranjero con una producción cercana a 100 cajas a la semana, unos mil litros, dependiendo los pedidos, pero están listos para crecer ante la demanda que ya tienen, sobre todo en el extranjero.

Pulque y bichos

Para la presentación de Conejo Blanco, se realizo una comida con maridaje de pulque en Antolina Condesa, donde cada año hay un festival de bichos, la cocina del maguey.

La familia Morales Huerta recolecta insectos comestibles como: escamoles, chinicuiles, xamues (cocopaches), chapulines, acociles.

Platillos como: el Huauzontle de chapulín en crema de morita con un curado de tres tipos de mango y cardamomo. Taco de escamoles y tuétano acompañado de pulque “Chamaquero”.

Uno más de Chinicuil con mole de café sobre chile ancho, relleno de papa y pure de cebolla que llega con un pulque “curado” de cacao tostado, chile ancho y clavo.

Para cerrar la degustación, el taco negro de pastor de cerdo con xamúes (chinche del árbol del mezquite) que “baila” con un pulque de taro, en una experiencia espectacular y única.

Pulque Octli y su Conejo Blanco siguen difundiendo la riqueza y propiedades de una bebida mágica y prehispánica que hasta ahora no ha recibido el reconocimiento que debe tener en nuestro país… pero que ya comienza a conquistar al mundo.

Israel Landa tiene Pulquería OCTLI en San Francisco, Nayarit, donde el rey, claro, es la bebida de los dioses.  (pulqueoctli.com)