Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 35 segundos
Ella es Marlen Garcés, una intrépida chica que decidió incursionar en uno de los deportes más rudos del mundo, el football.
Entrenar con los Rojos CDMX es una gran oportunidad para alcanzar el mayor nivel posible, y si eres mujer, el reto es aún más complejo. Marlen Garcés entrena con el primer equipo de los comandados por Raúl Rivera y no hay consideraciones aún por tratarse de una mujer. “A veces pienso que yo no elegí al football, sino que el football me eligió a mí, porque llegó a mi vida sin que lo buscara. El primer día que tuve la oportunidad de entrenar en un equipo de football me sentí viva, sentí que despertó algo dentro de mí que gritaba por salir, así que decidí escuchar aquello y dejarlo ser, y sin duda ha sido de las mejores decisiones que he tomado en mi vida”, comentó Garcés.
Desde hace 10 años entrena football equipada, se podría decir que es pionera en CDMX y admira desde entonces a muchos de sus coaches y otros jugadores, sin embargo, al ser liniera defensiva, tiene un gusto muy particular por el mejor del planeta, Aaron Donald de los campeones Rams de la NFL. “Me hubiera encantando nacer con ese talento. Me motiva a trabajar para ser la mejor en lo que hago, es un deleite ver como domina a sus rivales”, acotó.
“Pero quienes son mi verdadero ejemplo a seguir son mis compañeras de equipo, son una fuente constante de inspiración, nunca se rinden, nunca desisten, las condiciones en general para las mujeres en el football son más complicadas que para los hombres y sin embargo ahí están, brillando, asombrando a todos los que las voltean a ver”, agregó Marlen.
El football femenil equipado se ha ido abriendo camino poco a poco, gracias también a la participación internacional. Pero no todo ha sido miel sobre hojuelas, “Mi familia sabe que juego, aunque no creo que estén conscientes de lo que para una mujer implica poder entrenar con Rojos, pero me apoyan siempre aunque no sepan muy bien”, dijo.
A sus 34 años de edad, entrenar con los Rojos CDMX es un tema serio y al mismo tiempo, un desafío personal, “Me siento honrada por poder vivir estos entrenamientos y conocer cómo es el football a este nivel, es un nivel que asombra y me despierta el hambre de dar más y no quedarme atrás. Siento un gran desafío y un gran compromiso conmigo y con mis compañeros, para mí esto no es solo una vivencia curiosa y ya, lo tomo muy en serio porque espero que un día todas las mujeres también podamos tener esto, una liga profesional, es un honor ser quien inicie con este pequeño paso”, apuntó.
Así, Marlen Garcés, jugadora de Rojos CDMX, está consciente de la responsabilidad que para ella representa abrir más el camino para el football femenil equipado.