Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 59 segundos
En la última reunión de política monetaria presidida por el hoy exgobernador del Banco Central mexicano, Alejandro Díaz de León, la máxima instancia de la institución, su Junta de Gobierno, refirió que la más reciente alza en la tasa de interés de referencia de 5.50% respondió fundamentalmente al objetivo de mantener la convergencia con una inflación de 3% para México.
Las minutas, difundidas este jueves, revelaron que en “las próximas decisiones de política monetaria”, la junta vigilará “estrechamente la evolución de las presiones inflacionarias”, cuando el Banco Central inició el relevo en su dirección a partir del 1 de enero de 2022, en una nueva era dirigida por una mujer, Victoria Ceja, a propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador y aprobada por el Senado mexicano.
Las próximas decisiones de política monetaria de la Junta de Gobierno, se afirma en las actas, vigilarán el comportamiento de todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas.
Lo anterior “con el propósito de determinar una tasa de referencia que sea en todo momento congruente con la trayectoria que se requiere para propiciar la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3% en el plazo en el que opera la política monetaria, así como un ajuste adecuado de la economía y de los mercados financieros”.
Con relación al alza de tasas determinada el 16 de diciembre pasado, las minutas indican que se evaluó la magnitud y la diversidad de los choques que han afectado a la inflación y a los factores que la determinan; el riesgo de que se contamine la formación de precios, y los retos por el apretamiento de las condiciones monetarias y financieras a nivel global.
Destacaron que, con ello, “se ajusta la postura de política monetaria a la trayectoria que se requiere para que la inflación converja a su meta” en medio de un nivel de inflación que en noviembre de 2021 alcanzó un nivel de 7.37%, el mayor de los últimos 21 años.
Si bien en diciembre pasado se dio a conocer el sentido de la votación, quedó en resguardo la posición del voto disidente (subgobernador Gerardo Esquivel).
Por su relevancia, se publica la postura fijada ese 16 de diciembre del voto disidente:
Votos a favor: Alejandro Díaz de León Carrillo (gobernador) y subgobernadores Galia Borja, Irene Espinosa y Jonathan Heath
Voto en contra Gerardo Esquivel (subgobernador)
“La expectativa de una postura menos acomodaticia de la Reserva Federal afectó las condiciones financieras globales. Esto, combinado con factores idiosincráticos, ha generado mayor incertidumbre y volatilidad en mercados locales.
“Por ello, considero necesario reforzar la postura monetaria. El reforzamiento debe ser moderado, ya que una postura demasiado restrictiva tendría diversas implicaciones negativas. Debe evitarse una visión cortoplacista que reaccione mecánicamente con incrementos de tasas ante cualquier choque.
“Entender y comunicar adecuadamente la naturaleza del actual fenómeno inflacionario es crucial. Este se explica por factores exógenos que comenzarán a desvanecerse en meses subsecuentes sin que hubiese sido necesario un excesivo apretamiento prematuro de las condiciones monetarias locales.
“Los incrementos continuos en tasas no impidieron que la inflación aumentara a niveles no vistos en dos décadas. La razón es que el origen de este episodio es predominantemente externo.
“El argumento de control de las expectativas que ha justificado los aumentos ha sido desmentido en los hechos, pues las de corto plazo no han dejado de subir a pesar de los incrementos. En perspectiva, debe considerarse que adelantarse demasiado al proceso de normalización de la Reserva Federal nos pone en riesgo de caer en una trampa de bajo crecimiento e inestabilidad financiera”.