Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 27 segundos
El conglomerado regiomontano ALFA dijo que su subsidiaria Sigma Alimentos alcanzó un acuerdo para vender sus operaciones en Bélgica y los Países Bajos, lo que incluye seis plantas productivas y cinco marcas comerciales.
La negociación fue pactada con la belga Ter Beke Group e incorpora las marcas Marcassou, Imperial, Stegeman, Leielander y Bistro. Las operaciones y las marcas contribuyeron aproximadamente con el 1% del Flujo consolidado de Sigma en 2020, agregó ALFA en un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
Debido a la baja repercusión en la generación de flujo, expertos señalaron que la noticia tendrá un impacto neutral para el conglomerado.
“Dicha venta se encuentra dentro de la estrategia de mejora de rentabilidad de la subsidiaria, lo cual valida el avance para detonar mayor valor para los inversionistas.
“En el corto plazo nos mantendremos atentos a las aprobaciones de las autoridades, así como al reporte corporativo de Alfa (al tercer trimestre de 2021)” resaltó en un escrito el grupo financiero Monex, que sostiene hasta hoy una recomendación de “Compra” en la emisora.
La agencia de riesgos S&P Global señaló a su vez que la venta planeada de Sigma Alimentos –que exhibe una calificación a escala global de “BBB menos con perspectiva de “Estable”– también es neutral desde el punto de vista crediticio.
La agencia estima que Sigma utilizará los recursos producto de la transacción para fines corporativos generales, incluyendo inversiones de crecimiento en sus principales mercados europeos.
También refiere lo que implica el plan de desinversiones de la compañía.
“En nuestra opinión, la desinversión sigue la estrategia de Sigma de consolidar sus operaciones y centrarse en sus posiciones de liderazgo en los principales mercados europeos para mejorar su rentabilidad en la región.
“Consideramos que la transacción tiene el potencial de incrementar el margen de EBITDA de Sigma de sus operaciones europeas en alrededor de 50 puntos base”, anticipó.
La agencia de riesgos crediticios resaltó que espera que la política financiera de la subsidiaria de ALFA siga siendo prudente, con un apalancamiento neto de alrededor de 2.5 veces para el cierre de este año.
El director general de Sigma, Rodrigo Fernández, aseguró que la empresa está implementando un plan integral “para mejorar la rentabilidad y el crecimiento”.
“Esta transacción nos ayudará a consolidar nuestras operaciones y a enfocarnos en nuestras posiciones líderes en mercados europeos ´core´ (centrales) para alcanzar nuestro objetivo en margen EBITDA de doble dígito en la región”, aseveró Fernández.
Se espera que la operación quede cerrada en los próximos meses, sujeta a la autorización por parte de las autoridades de competencia y derechos de consulta de los empleados locales, de acuerdo con ALFA.