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A pesar de los avances en materia de género, México todavía está lejos de hablar de una verdadera paridad dentro de las empresas más grandes del país.
Un estudio del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), que involucró a las 157 empresas que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y en la Bolsa Institucional de Valores (Biva), indicó que 51 de ella —casi una tercera parte— no tenían a una sola mujer en sus consejos de administración.
De hecho, solamente el 3% de los consejos de administración de las emisoras listadas están encabezados por una mujer. Ellas tienen una mayor participación como consejeras suplentes —13%— y como consejeras propietarias —donde son el 9%—.
“En 2021, de los 2,507 consejeros totales que participan en las empresas listadas en las bolsas, solo 10% son mujeres”, reveló el organismo.
Dos de las empresas más grandes del Índice de Precios y Cotizaciones de la BMV —Grupo México y Grupo Elektra— no cuentan con una mujer en sus consejos. Por el contrario, donde más presencia hay es en Wal-Mart de México, donde ellas representan el 25% de los consejeros.
Y la baja participación femenina trasciende a las principales direcciones, ya que solo cuatro empresas de la muestra reportaron contar con una directora general.
“Hay una baja representación en las direcciones jurídicas y financieras. Uno de cada cinco directores jurídicos es mujer, pero la proporción es menor para los directores de finanzas (8%), detalló el IMCO.
Adicionalmente, cuatro empresas incumplieron con los requisitos de la Circular Única de Emisoras (CUE) que emite la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y exige desde 2017 reportar el sexo de los miembros que conforman sus consejos de administración y direcciones relevantes. “97% de las empresas analizadas sí cumplió”.
Para incrementar la presencia de mujeres en las empresas, el IMCO propone “hacer un autodiagnóstico más preciso, basado en datos, que permita dimensionar las brechas de género, identificar las barreras para las mujeres y así diseñar políticas corporativas de inclusión más efectivas”.
También propone “sumar, en el corto plazo, a más mujeres a los equipos de toma de decisiones. Para ello, se pueden aprovechar las redes que se han construido para detectar y promover a las mujeres con más conocimientos y experiencia en diferentes áreas”.
Por Raúl Castro-Lebrija
