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El presidente Andrés Manuel López Obrador insistió en que, en lo que resta de su administración, se buscarán tres reformas constitucionales para reforzar a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para pasar a la Guardia Nacional a control de la Defensa y para reforzar al Instituto Nacional Electoral (INE) y evitar fraudes electorales.
El mandatario ofreció su conferencia de prensa mañanera en Acapulco, Guerrero, luego de una gira de trabajo que lo llevó por diferentes municipios de la entidad.
Ahí señaló que, con las reformas hechas a la carta magna durante su administración se han logrado revertir parte de los cambios hechos durante en el periodo neoliberal en el cual, según sus palabras, se adecuó el marco constitucional para pasar a control privado los bienes nacionales.
En este marco se encuentra la privatización bancaria y de las empresas públicas desarrollada durante el gobierno de Carlos salinas de Gortari, y la privatización de la administración de fondos para el retiro en el gobierno de Ernesto Zedillo.
Ya durante su administración, dijo López Obrador, se hicieron cambios como prohibir la condonación de impuestos a grandes contribuyentes.
“En los dos últimos sexenios anteriores al nuestro, se les condonaron a los grandes cerca de 400,000 millones de pesos de impuestos. Eso ya se terminó”, aseguró el mandatario.
Sin embargo, aclaró, quedan pendientes tres reformas constitucionales siendo la primera de ellas reforzar a la CFE para que tenga una mayor participación en el despacho de energía eléctrica, cuando hoy se favorece a los productores privados y, en particular a las empresas españolas.
“Se requiere fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad y no darle la preferencia a las empresas particulares, La Comisión Federal de Electricidad no tiene fines de lucro y se le tiene que apoyar”, sostuvo.
En segundo lugar se refirió a pasar la Guardia Nacional bajo control de la Secretaría de la Defensa, para que no sufra el mismo proceso de descomposición que vivió la Policía Federal.
Y, finalmente, López Obrador se pronunció por una reforma electoral “para que se termine, de una vez y para siempre, el fraude electoral. Ya avanzamos en esta pasada elección. Por primera vez en mucho tiempo no hubo una elección de Estado. El presidente de la República, el gobierno federal no intervinieron en las elecciones. No se usó el presupuesto público, pero todavía falta”.
Según López Obrador, con esto habría bases para proteger los cambios hechos durante su administración y que el próximo gobierno no pudiera revertirlos fácilmente.
Por Raúl Castro-Lebrija