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El monto acumulado anual de remesas en México superó los 23 mil millones de dólares, lo que significa que están en su punto más alto desde que empezaron su recuperación en el segundo trimestre de 2010 y se encuentran en los niveles alcanzados en el segundo trimestre de 2006.
Un análisis económico del BBVA Research, basado en cifras del Banco de México, indica que las remesas registran 18 meses con aumentos consecutivos y a marzo de 2012, cuando ingresaron dos mil 81.95 millones de dólares al país, registraron un crecimiento anual de 1.4% en dólares, así como un alza de 16% en relación con febrero de este año.
En términos de pesos reales (descontando la inflación), las remesas presentaron un crecimiento anual de 3.8%, según el “Flash Migración México” elaborado por la institución.
Este incremento fue el resultado de un mayor número de operaciones para el envío de remesas que tuvieron un crecimiento anual de 3.6% para situarse en 6.19 millones de transacciones. El monto de las remesas promedio en marzo fue de 336 dólares, cifra superior en 5.0% a la del mes anterior, pero inferior en 2.1% a la marzo del año previo.
En el primer trimestre de 2012, las remesas sumaron cinco mil 372.2 millones de dólares, 5.3% más que las del mismo periodo del año pasado.
De enero a marzo de 2012, las entidades que más remesas recibieron fueron: Michoacán (538.4 millones de dólares), Guanajuato (498.7 millones de dólares) y Jalisco (462.2 millones de dólares). Según el Censo de Población y Vivienda de 2010, estos tres estados son los que más migrantes registran en los últimos años.
El análisis económico del BBVA Research indica que de los cuatro millones de puestos de trabajo recuperados en Estados Unidos después de la recesión, más de dos millones han sido para hispanos y en particular para los mexicanos, factor que principalmente explica el comportamiento de las remesas.
En marzo de 2012, los hispanos radicados en Estados Unidos alcanzaron un nuevo máximo histórico en puestos de trabajo, al lograr 21.64 millones de empleos.
Puntualiza que en 2011 el tipo de cambio fue un factor que favoreció los mayores envíos de dinero de los migrantes mexicanos en el extranjero, pero en 2012 este hecho perderá relevancia.
Los especialistas estiman que el empleo de los migrantes mexicanos seguirá al alza y por lo tanto las remesas también, las cuales podrían ubicarse en abril en alrededor de los dos mil millones de dólares, e incluso por debajo de este nivel debido a que por lo general en este mes se observa una ligera contracción en el envío de dinero a México.
