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El parlamento griego decidirá este jueves las leyes que permitirán el canje de deuda de inversores privados por bonos de menor valor como parte del plan para disminuir la deuda de Grecia de 160% del Producto Interno Bruto (PIB) a 120.5% al año 2020.
Esta medida forma parte del paquete de ayuda que ofreció el Eurogrupo y que obliga a Grecia a disminuir gastos y a aprobar estrictas reformas, que ha llevado a las calles a miles de griegos inconformes por las medidas que implican la pérdida de beneficios sociales.
Los ministros de Finanzas de la zona euro determinaron reducir la deuda griega a 120.5% del PIB para el año 2020, lo que significará recortes en salarios y pensiones, reformas al sistema de salud, menos empleos, mayor austeridad y decrecimiento económico.
El Eurogrupo aprobó el martes un nuevo rescate para Grecia por 130 mil millones de euros (unos 172 mil millones de dólares) con el propósito de evitar un cese de pagos y cumplir con su deuda de bonos que vence el 20 de marzo próximo por un monto de14 mil 500 millones de euros.
El préstamo de 130 mil millones de euros por parte de la Unión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) hasta finales de 2014, se suma al de 110 mil millones otorgado en mayo de 2010.
Jean Claude Juncker, presidente del Eurogrupo de ministros de Finanzas, dijo que el acuerdo permitirá una significativa reducción de la deuda de Grecia y asegurar el futuro de este país en la zona euro.
El acuerdo alcanzado obliga a Atenas a lanzar un canje de bonos a más largo plazo con inversores privados para reestructurar su deuda, lo que implicará la amortización de unos 100 mil millones de euros en deuda. Con la medida, los tenedores privados asumirán pérdidas de 54% o más sobre el valor nominal de sus bonos.
El Banco Central Europeo (BCE) anunció que entregará las ganancias que obtuvo por la compra de bonos griegos en los últimos dos años a los bancos centrales de la eurozona, a fin de que estos giren esos fondos a Grecia, que desde hace cinco años vive una profunda recesión.
La agencia calificadora Fitch bajó este miércoles la nota de solvencia de Grecia de “CCC” a “C”, al estimar “altamente probable a corto plazo” un default de Grecia.