Deer Park: buen negocio para Pemex, malo para México

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La nueva refinería podría apoyar la producción de combustibles, pero implicaría mandar recursos al extranjero que van a reactivar sectores del mercado estadounidense, asegura el analista Ramsés Pech Razo.

La compra de la refinería de Deer Park ubicada en Houston, Texas, en casi 600 millones de dólares representa un buen negocio para Petróleos Mexicanos (Pemex) pero uno malo para el país.

Así lo consideró el experto y analista Ramses Pech Razo, al participar en el conservatorio Las implicaciones económicas que tendrá la compra de la refinería con el Fonden.

De acuerdo con el especialista, para el año 2050 México seguirá necesitando de combustibles derivados del petróleo, debido a la baja penetración que tienen los vehículos eléctricos.

Según datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), al pasado mes de abril solo había en México 1,480 autos eléctricos de un parque vehicular de 35.3 millones de unidades en circulación.

A este pasó, consideró, México podría tener únicamente automóviles eléctricos en algún punto entre los años 2080 y 2100; es decir, seguirá habiendo demanda para combustibles fósiles.

De la mano de este problema, continuó Pech Razo, las seis refinerías de México no operan siquiera a un 60% de su capacidad, debido a la baja inversión en mantenimiento. Para llegar a un 80% de capacidad, estimó, se necesitaría una inversión de entre 18,000 y 20,000 millones de pesos.

Además, la Refinería de Dos Bocas que según el presidente López Obrador iniciaría operaciones el 18 de marzo de 2023está mostrando retrasos debido a la pandemia de Covid-19.

Es decir, Deer Park podría apoyar o sustituir a alguna de las seis refinerías mexicanas que no alcance a incrementar su capacidad o a la misma Dos Bocas si registra más retrasos en su inauguración.

Sin embargo, advierte el analista y experto, una mayor participación de Deer Park representaría enviar recursos al exterior, que no se emplearán en la reactivación económica del país; es decir, será un mal negocio para México.

Ese dinero que vamos a pagar por las acciones que Shell tiene, es un dinero que vamos a enviar fuera de nuestro país y vamos a ayudar a ciertas cadenas productivas del mercado de Estados Unidos, cuando ese dinero debió quedarse en nuestro país, subrayó.

Es decir, México dependería de que se concrete la compra de Deer Park y se pueda enviar toda su producción a México, sumado a que Dos Bocas inicie operaciones en 2023 y se aumente la productividad de las seis refinerías.

Si estas tres cosas no suceden en el año 2023, no vamos a ser autosuficientes. Por ello, la refinería de Deer Park es un buen negocio para Pemex, debido a la falta de certidumbre en las seis refinerías de del pais, y un mal negocio para México, sintetizó el experto.

Por Raúl Castro-Lebrija