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El Banco de México decidió mantener la tasa de interés interbancaria en 4.5%, tal como era esperado por el sector financiero del país, al considerar que la postura actual de la política monetaria es conducente para alcanzar una inflación de 3%.
La Junta de Gobierno del banco central indicó que se mantendrá atenta a la evolución de todos los determinantes de la inflación, ya su comportamiento podría llevar a ajustar la política monetaria para hacerla más o menos restrictiva dependiendo del escenario que se presente.
Señaló que la actividad económica global continuó debilitándose durante los últimos meses y en la zona del euro se mantiene la vulnerabilidad de los bancos y la dificultad de acceso de algunos gobiernos a los mercados de deuda soberana, por lo que persiste el riesgo de contagio.
En Estados Unidos, el crecimiento de la producción industrial se ha moderado y la recuperación del empleo no ha logrado consolidarse, además de que persiste la incertidumbre sobre el ajuste fiscal que podría aplicarse en 2013, agregó el Banco de México.
En gran parte de los países emergentes el ritmo de crecimiento de la actividad económica ha continuado desacelerándose y los riesgos a la baja para el crecimiento económico mundial se han intensificado, debido al menor ritmo de actividad económica global y al descenso de los precios internacionales de las materias primas, con excepción de algunos granos, abundó.
Por su parte, la economía de México siguió con una tendencia positiva, el sector externo ha mantenido su dinamismo, aunque la demanda interna ha presentado una ligera desaceleración, pero la brecha del producto se ha cerrado a niveles cercanos a cero, apuntó el Banco de México. También destacó que la inflación general registró un repunte y que se revirtió parte de la depreciación de la moneda nacional que se registró en abril y mayo pasados.
Arturo Vieyra, analista de Banamex Citi, dijo que al mantener sin cambios la tasa de interés de acuerdo con los recientes eventos, tanto locales como externos, el banco central refrendó su postura neutral de política monetaria.
Señaló que el Banxico distingue claramente dos tendencias, respecto al crecimiento económico subraya el buen desempeño de la primera mitad del año y afirma que la brecha de producto (diferencia entre el desempeño observado y el potencial de largo plazo) prácticamente se ha cerrado, aunque sostiene que todavía no se presentan presiones inflacionarias. Asimismo, enfatiza los riesgos más acentuados contra el crecimiento proveniente del exterior, con Europa en recesión y Estados Unidos con un crecimiento débil.
El banco central también reconoce la tendencia ascendente de la inflación impulsada principalmente por los precios agropecuarios del año, pero “llama la atención que en la óptica de Banxico, dos factores que favorecen el equilibrio sobre los riesgos inflacionarios radican en la fortaleza del tipo de cambio y la debilidad de la economía”, dijo el analista.
“Estaremos especialmente interesados en leer la minuta de la reunión con la finalidad de evaluar de mejor manera la discusión actual al interior de la Junta con relación a las condiciones monetarias y la evaluación más detallada de los riesgos sobre crecimiento e inflación global”, sostuvo.
