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El pronóstico contempla un crecimiento secuencial moderado para el tercer trimestre, con una estabilización del dinamismo económico entre octubre y diciembre.
Grupo Financiero Banorte dijo el miércoles que elevó sus expectativas de crecimiento de la economía de México para este año, de 2.7% a 3%.
Lo anterior responde a ajustes metodológicos realizados por el INEGI en las series históricas de las cuentas nacionales, lo que ocurre cada 5 años, pero también a una mejor perspectiva.
El área de análisis económico del banco aseveró que ve para el país “un panorama más constructivo para la segunda mitad del año”
“Sobre este último punto reconocemos factores positivos tanto en el corto como en el mediano plazo”, indicó, donde menciona fundamentales sólidos que seguirán impulsando el consumo, que junto con la inversión han sido los motores de crecimiento en los meses recientes.
Cita datos adelantados de ventas por parte de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicios y Departamentales (ANTAD) y de vehículos, los cuales “sugieren que el dinamismo continúo en julio”.
La entidad resalta que por el lado de la inversión, esta se mantendría apoyada por “los esfuerzos del gobierno federal por terminar algunos proyectos prioritarios antes del final del sexenio”.
También pone énfasis sobre “el interés en espacios industriales derivado del nearshoring”.
El día previo, el Sistema de Cuentas Nacionales de México del INEGI dijo que el PIB total del país creció 3.6% a tasa anual en el segundo trimestre del año, contra la cifra preliminar de 3.7% y atrás del crecimiento de 3.8% mostrado en el primer trimestre.
Lo anterior implicó un crecimiento trimestral de 0.8%, inferior al 0.9% contenido en el dato oportuno.
Sin embargo, el resultado trimestral significó 7 trimestres consecutivos de expansión para el país, reafirmando un nuevo máximo de producción, tomando en cuenta la serie histórica.
Al interior del PIB, el crecimiento estuvo liderado por la industria, que avanzó a tasa anual 4%, mientras que los servicios lo hicieron 3.5%, y las actividades primarias en 1.9%; todos los números fueron calificados de positivos por Banorte.
Con esto, la actividad económica acumuló un crecimiento de 3.7% durante los primeros 6 meses de 2023; con cifras ajustadas por estacionalidad, avanzó 3.6%.
Retos
Banorte ve que los desafíos de la economía mexicana hacia adelante sean externos, principalmente, derivados de un menor dinamismo del sector de las manufacturas a raíz de la debilidad de China y la Eurozona.
Además, el sector en Estados Unidos, el principal socio comercial de México y la mayor economía mundial, se ha estancado en los últimos meses.
“Sin embargo, un punto positivo al interior es el rubro automotriz, en el cual hemos visto esfuerzos por recuperar los niveles de producción prepandemia ante mejorías en las cadenas de suministro”, aseguró la entidad.
Otro punto de interés serán los precios, con riesgos de aumentos más fuertes en categorías clave, como los energéticos y alimentos, donde en estos últimos sobresalen los efectos negativos que podría ocasionar el fenómeno meteorológico del El Niño.
El escenario se vería compensando con materias primas industriales, que podrían estar más limitados por la moderación en la demanda global, como el caso del cobre y el aluminio.
“Tomando estos factores en cuenta, nuestro pronóstico contempla un crecimiento secuencial moderado en el 3T23 (tercer trimestre) con una estabilización en el último trimestre del año”, dice.
