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La inflación en México mostró en la primera quincena de junio una desaceleración, la segunda más fuerte de 2023, mientras que los precios de mercancías y servicios que marcan la tendencia de más largo plazo tuvieron su mayor caída del ciclo y su segundo mayor descenso en dos años y medio
La inflación en México creció en 0.02% en la primera quincena de junio en su comparación quincenal, resultando en una tasa anual de 5.18% frente a la de 5.67% del periodo previo y por debajo del nivel de 5.31% esperado por el mercado.
“En la misma quincena de 2022, la inflación quincenal fue de 0.49% y la anual, de 7.88 por ciento”, agregó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) al dar a conocer la información el jueves.
El índice de precios subyacente o el que marca la trayectoria de los precios de mercancías, bienes y servicios en el largo plazo, considerado por ello un dato clave, aumentó 0.11% a tasa quincenal y 6.91% a tasa anual.
A su vez, el índice de precios no subyacente, aquel que involucra precios volátiles relacionados con la Energía y la Agricultura, continuó con sus retrocesos, en esta lectura de 0.26%
Al interior del índice clave, a tasa quincenal, en la primera quincena de junio los precios de las mercancías subieron 0.08% y los de servicios en 0.15%.
Dentro del índice no subyacente, a tasa quincenal, los precios de los productos agropecuarios disminuyeron en 0.24%, mientras que los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno mostraron una contracción de 0.27%.
Marcos Daniel Arias, de Grupo Financiero Monex calificó los datos como “verdaderamente alentadores” para afianzar la estabilidad de los precios en México, además que “abren la puerta a que el regreso al objetivo de Banco de México pueda llegar antes de lo previsto”, al referir la tasa objetivo de inflación del Instituto Central de 3%.
“Hacia el cierre del año, se mantiene la expectativa de una inflación anual del 5%”, dijo Gabriela Siller, directora de análisis económico de Grupo Financiero Base.
Un compendio de estimaciones de 34 analistas recabado por Citibanamex en esta semana indicó que la expectativa mediana para la inflación general al término de este año disminuyó marginalmente a 4.99%, desde el 5% de la proyección anterior, mientras que para 2024 de 4.01% a 4%.
“Los riesgos que podrían incrementar la inflación general son: presiones en los precios de servicios debido a una mayor demanda, regreso de incrementos en precios de productos agropecuarios, debido a su naturaleza volátil y a la posibilidad que se cierre el corredor de granos del Mar Negro”, enumeró Siller, que también tomó en cuenta un incremento en costos en los energéticos debido a una mayor demanda de electricidad en México por un mayor uso de aires acondicionados por la temporada de verano, donde se han registrado calores inusitados.
¿Bajan?
Según las cifras quincenales de inflación proporcionadas por el Instituto, el huevo, el gas doméstico, el limón, así como los servicios de telefonía móvil exhibieron en la primera quincena de junio caídas de 7.19%, 3.46%, 8.58% y 1.03%, los que más incidencia presentaron en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
Les siguieron los descensos en los precios del pescado, automóviles, zapatos tenis y jamón, de 1.55%, 0.23%, 0.89% y 0.82%, por su grado de incidencia en el índice general.
Por el contrario, los productos cuyos precios se resistieron a descender fueron los del jitomate, vivienda propia; los de las loncherías, fondas, torterías y taquerías, así como el chayote, con alzas de 5.53%, 0.15%, 0.30% y hasta 22.14% en una quincena, respectivamente.
Siller destacó que en la primera quincena siguieron difuminándose las presiones sobre los precios que marcan tendencia disminuyendo por novena quincena consecutiva y ubicándose en su menor nivel desde la segunda quincena de marzo del 2022.
A tasa anual, la inflación de mercancías se ubicó en 8.33%, la menor desde la primera quincena de febrero del 2022 y disminuyendo durante once quincenas consecutivas con una inflación quincenal de 0.26%, muy por debajo del promedio observado el año pasado para ese mismo periodo, de 0.47%.
El subcomponente de servicios, o los precios de este componente, colocaron por debajo del ritmo de crecimiento quincenal promedio de 0.23% de las diez primeras quincenas del año.
Lo anterior permitió que, a tasa anual, la inflación de servicios se ubicara en 5.23%, su menor nivel desde la segunda quincena de diciembre del 2022.
Nubarrones
INEGI mostró que el INPC de la primera quincena de junio ha exhibido descensos continuos a tasa anual, colocando en 6.02%, 7.88% y 5.18% para los años 2021, 2022 y 2023.
El indicador clave o los precios subyacentes, a su vez, ubicaron tasas en esos periodos de 4.58%, 7.47% y 6.91%.
Dentro de los precios subyacentes, los precios de las mercancías han presentado tasas de 5.90%, 9.85% y 8.33% para las primeras quincenas de junio de 2021, de 2022 y de 2023, respectivamente.
Los de los Servicios, por su parte, han colocado en 3.11%, 4.77% y 5.23%, en los mismos periodos.
Los descensos de precios del índice no subyacente o de precios más volátiles, y que por lo tanto no marcan tendencia, han sido más pronunciados en ese mismo lapso. Así, para la primera quincena de junio de 2021 colocaron un crecimiento de 10.61%, para igual periodo de 2022 de 9.13%, cayendo hasta el 0.03% en la primera quincena de junio de este año.
Un reporte del Grupo Financiero Banorte destacó que sigue viéndose una mejoría notable en energéticos debido a las caídas del gas LP y pese al aumento de la gasolina de bajo octanaje (Premium), lo que incide en la buena marcha del índice general.
Sin embargo, Alejandro Padilla, director general adjunto de análisis económico y financiero de Banorte, resaltó que su equipo de análisis no modificará su expectativa de inflación general de 4.8% para este año, con un índice subyacente de 5.6%.
“…los reiteramos ante la necesidad de cautela por las potenciales presiones en alimentos y energéticos en los próximos meses”
“Lo que más nos preocupa es el efecto que podrían tener las altas temperaturas en la producción agropecuaria y la demanda de energéticos (e.g. electricidad y gas natural para ventilación)”, apuntó.
Citando datos de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de EE.UU. (NOAA), Banorte menciona que desde mayo de este año se ha presentado el fenómeno El Niño, con mayores temperaturas promedio en la superficie del mar Pacífico que generan distorsiones climatológicas mundiales, como sequías y huracanes.
Históricamente el fenómeno ha tenido grandes afectaciones en lapsos relativas largos, de una duración promedio de 9 a 12 meses. Las probabilidades de que en esta ocasión sea un evento moderado o fuerte son de 84% y 56%, respectivamente.
Con base en un estudio publicado en 2017 en el Journal of International Economics,“Fair Weather or Foul? The Macroeconomic Effects of El Niño”, el banco cita que la mayoría de los países experimentan presiones inflacionarias por el fenómeno debido a que inducen mayores precios de commodities, tanto energéticos, como no energéticos.
“Para México, estiman un impacto acumulado de 1.01 pp (puntos porcentuales) al alza en la inflación luego de dos trimestres. En este contexto, el último episodio importante fue de mayo de 2014 a junio de 2016. En este periodo, los precios de los bienes agropecuarios en México repuntaron 12.3% acumulado (5.7% anualizado)”, según la dirección de análisis económico de Banorte.