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Según el presidente, “es cosa nada mas de ver cuáles son los requisitos” ya que en la actualidad “todas las operaciones se hacen por aplicaciones y ya no hacen falta las ventanillas”.
Luego de que el Banco del Bienestar abriera más de 1,800 sucursales en todo el país, el presidente Andrés López Obrador adelantó que no descarta que la institución se transforme en una Fintech ya que, actualmente, “todas las operaciones se hacen por aplicaciones y ya no hacen falta las ventanillas”.
Desde que el presidente anunció su intención de crear al Banco del Bienestar, diversos sectores criticaron que la principal apuesta fuera por la construcción de sucursales en lugar de aprovechar los avances tecnológicos.
Para abril de 2022, por ejemplo, organismos como el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) acusaron opacidad, además de retrasos, en la construcción de esas sucursales, por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Según el organismo, existía un rezago en la construcción del 55% de dicha red. “De acuerdo con la meta planteada, la Sedena debía construir 2,700 sucursales para finales de 2021. Sin embargo, a febrero de 2022 han sido construidas 1,212 sucursales, 663 están en construcción y 834 están pendientes de construir”.
El IMCO encontró también que no existía claridad ni continuidad en la meta de expansión. “La meta de sucursales a construir, entre documentos oficiales y declaraciones, ha variado de 7,000 sucursales en 2021, a 2,700 para el mismo año y 2,744 para 2023. Esto, sumado al rezago actual, evidencia la falta de una planeación rigurosa que considere el tiempo de construcción por cada sucursal”.
Y Perón aún, “no es posible conocer cómo ha gastado la Sedena para la construcción de las sucursales ni hay información disponible sobre el uso de recursos materiales y humanos para la construcción del Banco del Bienestar”.
Más adelante, dentro del sector financiero mexicano también se criticó que el banco cancelara los contratos de corresponsalía bancarias firmados con instituciones como Gentera, que permitirían a pequeños negocios locales como tiendas de abarrotes o tlapalerías, funcionar como esas sucursales bancarias aprovechando las nuevas tecnologías.
A pesar de todas estas críticas, el gobierno de López Obrador continuó con la construcción de sucursales y, para el pasado 10 de mayo, reportó 1,836 puntos en 1,208 municipios del país.
AHORA, UNA FINTECH
Ya en la conferencia de prensa matutina de este viernes, López Obrador anunció que no descarta la posibilidad de pedir la autorización para que el Banco del Bienestar opere como una Fintech, ya que “todas las operaciones se hacen por aplicaciones; ya no hacen falta las ventanillas”.
Puso como ejemplo que “todo lo que cobra la Tesorería de la Federación es con aplicaciones. Entonces, si no se pueden tener las oficinas, sí se podría tener el sistema para recibir, recaudar, los fondos”.
Según López Obrador, “es cosa nada mas de ver cuáles son los requisitos y se podría lograr. O, el mismo Banco del Bienestar, que tuviese una plataforma digital. Explorar todas las posibilidades”.