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En Qatar, Leandro Rodriguez, cobertura especial para Revista Fortuna
Si hubo un Mundial donde prejuzgamos antes de tiempo ha sido Qatar 2022. Los edificios inmensos, el lujo en cualquier parte de la ciudad, los centros comerciales de primer nivel y la presencia de la Copa del Mundo, hicieron creer que para el periodista o el turista, iba a ser el Mundial más caro de la historia. Sin embargo, nada de eso sucedió y el panorama con el que nos hemos encontrado es absolutamente distinto a lo pensado en un principio.
El Mundial de Qatar 2022 se puede marcar como accesible económicamente. Dejando de lado el costo de los pasajes de avión o el precio de un ticket para ver un partido de la Copa del Mundo, en lo que respecta exclusivamente a Qatar, es un país barato para el consumo. Un dólar vale 3.64 reales qataríes y la realidad es que cambiando 100 dólares, el billete local rinde mucho en el día, a punto tal que con esos 100 dólares se pueden estirar a más días todavía.
El metro es gratis, el Uber es increíblemente barato. Un Uber, con un viaje de media hora, cuarenta minutos, no te cobrará más de 8 dólares y por la experiencia vivida día tras día, los autos que se usan como flota de Uber son de primer nivel y algunos de ellos, excesivamente buenos para usarlos. En los últimos días hemos pedido varios Uber y han caído en camionetas Kia de último modelo.
La red de metro te lleva a todas partes de la ciudad y los autobuses son impecables y son gratis si se presenta acreditación o ticket de partido. El boleto no llega a costar un dólar y lógicamente cuentan con todas las comodidades, incluyendo el bendito aire acondicionado.
En lo que respecta a la comida, Qatar es realmente barato. Lógicamente, una cena en The Pearl te costará mucho dinero, pero hablando de lugares normales y comunes para el fanático o el periodista, Qatar ofrece precios accesibles entre 20 y 40 reales qataríes, cifra que no llega a ser 15 dólares. La comida es variada y hay todo tipo de culturas. Lo mismo sucede con los centros comerciales a lo largo de la ciudad.
Los centros comerciales son un punto neurálgico para los hinchas ya que recorren y aprovechan los precios razonables que se ofrecen en marcas importantes como Adidas, Victoria Secret, American Eagle, Nike. Una remera de la última línea de Adidas cuesta 150 reales qataríes, algo que no llega a los 50 dólares, mientras que en lugares como American Eagle o Superdry te ofrecen pantalones de la última temporada a 200 reales qataríes, pero te puedes llevar otro gratis.
Qatar ha impresionado en todos los aspectos. El precio de quitarle el Mundial 2022 a Estados Unidos, posiblemente haya hecho que parte del arco mediático opere contra este torneo, está ciudad. La realidad es otra y la lección es no prejuzgar. Qatar tendrá lujo, millones y crecimiento, sin embargo, resulta accesible para la mayoría.
