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En la conferencia de prensa matutina, el mandatario adelantó que la institución será la única entidad pública que recibirá remesas, otorgará créditos a la palabra y manejará las Tandas del Bienestar.
El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la transformación de Telecom —la entidad encargada del envío de telegramas y giros postales— en la Financiera del Bienestar que será la única entidad pública autorizada para el manejo de remesas, el otorgamiento de créditos a la palabra y de manejar las llamadas Tandas del Bienestar.
La Financiera del Bienestar, añadió el mandatario, también albergará un centro de atención a migrantes que quieran regresar a vivir en México.
En la conferencia de prensa matutina de este jueves, López Obrador explicó que el Banco del Bienestar —que ha recibido múltiples señalamientos por la poca transparencia con la que se están construyendo las sucursales— se dedicará a la dispersión de los recursos de los programas gubernamentales.
El Banco del Bienestar —que se espera tenga entre 2,800 y 3,000 sucursales— servirá para que “el adulto mayor cobre ahí, que el que tiene la beca cobre ahí, que el campesino que recibe el apoyo del programa Producción para el Bienestar o Sembrando Vida cobre ahí”.
Añadió que “ya estamos dispersando cerca de 450,000 millones de pesos y va a ir creciendo. Yo considero que ese banco va a llegar a dispersar, antes de que terminemos, cerca de 700,000 millones de pesos”.
Aunque, por tratarse precisamente de un banco, el organismo podría hacerse cargo de operaciones de ahorro y crédito, López Obrador anunció la transformación de Telecom —que ya tiene cerca de 1,700 sucursales— en la nueva Financiera del Bienestar.
La financiera “va a recibir ahorros y, al mismo tiempo, va a entregar créditos. Va a ser la única institución pública para entregar los créditos a la palabra y las Tandas para el Bienestar. Y ahí vamos a crear un centro de atención a migrantes que quieran regresar” a vivir en México.
López Obrador se negó a hablar de plazos para echar a andar el proyecto pero advirtió que “ya estamos trabajando en eso”.
Por Raúl Castro-Lebrija