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Con una semana previa de mercada volatilidad, el peso mexicano mostró una apreciación diaria en ese lapso. De hecho, este ha sido la tónica de las últimas sesiones, donde la moneda se ha apreciado 1.68% en los últimos 5 días, hasta este martes. La foto completa, sin embargo, no es halagüeña: en los últimos 12 meses, el peso ha mostrado una caída de -18.42% contra el dólar, mientras en lo que va del año la depreciación es de -18.73%.
El peso mexicano compara bien con el real de Brasil, y ha sido defensivo frente al desempeño de otras monedas de mercados emergentes.
El entorno no es alentador con las últimas cifras de contagios y decesos a causa del Covid-19 en México, una mayor percepción del Riesgo País y datos recientes de empleo que arrojan que entre marzo y junio se perdieron más de un millón de empleos.
Los contratos del peso mexicano en el mercado de futuros de Chicago sumaron en la primera semana de julio 14,980, esto es 5,976 contratos menos que la semana previa. Banco Base indicó en un reporte emitido el lunes que lo anterior “es señal de cautela con respecto a la dirección del tipo de cambio”; cada contrato de este tipo registra un valor de 500 mil pesos.
En fechas recientes, hay datos que pueden llegar también a empañar la buena trayectoria del peso.
El Riesgo País de México medido por el credit default swap (cds) a 5 años se incrementó en 3 puntos base (pb) la semana pasada, cuando los cds de los mercados emergentes aumentaron solo 1 pb en promedio, hasta el jueves pasado.
Sin embargo, una reunión virtual entre la OPEP y sus aliados (OPEP+) a celebrarse mañana miércoles puede “equilibrar” el panorama, ante crecientes versiones de que las compañías de petróleo de Rusia preparan un incremento de la producción en los siguientes meses; el comportamiento del mercado global de petróleo tiene una relación directa con el mercado de divisas.
Frente a otras monedas de la región, el peso mexicano también ha sacado la garra.
El real de Brasil exhibe caídas más severas frente el dólar con relación al peso mexicano. En lo que va 2020, la moneda sudamericana ha perdido -32.20% contra el dólar, mientras que en los últimos 12 meses la caída ha sido de -41.70%.
El peso chileno ha tenido ganancias más moderadas en la última semana, pero se ha convertido en la favorita de la región ante respuestas más contundentes de su gobierno en las medidas extraordinarias de apoyo a los mercados financieros y a la población ante los estragos de la pandemia. Durante este año, la divisa chilena ha mostrado una caída de 7.13% frente al dólar, en tanto que en los últimos 12 meses exhibe una baja de -15.93%.
Economistas estiman que si bien la caída del PIB de México será de dos dígitos en este año, el periodo con los estragos más serios de la recesión, agravada con el arribo de la nueva cepa del coronarivus, pasó ya.
Veremos entonces el oxígeno con el que cuenta la moneda mexicana en lo que resta 2020.
