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Expertos indicaron que los efectos del Covid-19, que ya se resienten en México con los primeros 5 casos detectados, tendrían un impacto directo en la mezcla mexicana de importación, ante el entorno mundial de incertidumbre y un menor crecimiento global, incluido el de China.
Esto representaría expectativas todavía más débiles sobre el desempeño de la economía mexicana, donde el consenso de analistas situaba antes del fenómeno un crecimiento de 0.9% del PIB.
De hecho, la OCDE emitió este lunes un informe sobre las repercusiones de la nueva cepa del coronavirus en la economía mundial, donde rebajó sus proyecciones de crecimiento para México de 1.2% a 0.7% para este 2020.
China es el principal comprador de cobre y mineral de hierro a nivel mundial pero la epidemia exportada desde Wuhan afecta una demanda más diversificada como el petróleo, que está reaccionando a la baja, ante el temor que la economía global sea arrastrada hacia una desaceleración, de acuerdo con una nota informativa de BlackRock.
“El coronavirus infectó al precio del petróleo porque, ante la potencial desaceleración económica global, se asume una menor demanda del hidrocarburo”, mencionó a su vez el director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), José Luis de la Cruz, organismo con vínculos con organizaciones industriales como Concamin, cuya página web indica que alrededor del 30% del PIB generado en el país proviene de sus afiliados.
La mezcla mexicana se encuentra por debajo de los 40 dólares por barril, lejos de lo anticipado en el presupuesto público de México, de 49 dólares por barril. El precio del petróleo de exportación de México ha perdido cerca del 30% de su valor en lo que va del 2020, colocándose en 39.67 dólares por barril al 28 de febrero, de acuerdo con información del IDIC.
Si bien México contaba con un seguro contratado para los casos de ajustes en las cotizaciones del petróleo, el entorno traerá en consecuencia la eliminación de estos excedentes, al menos en el primer cuatrimestre del año.
¿En caída libre?
Pemex enfrenta problemas severos para revertir una tendencia negativa en sus finanzas, producción y administración desde hace más de 20 años.
A fines de febrero, Pemex mencionó a analistas de bancos locales e internacionales en un conference call que la baja en sus ingresos en el cuarto trimestre de 2019 provino de una caída de 20% en sus ventas nacionales y del 23.4% en sus ventas externas.
En ese mismo periodo, la producción de hidrocarburos alcanzó 1,712 miles de barriles diarios (mbd), una disminución de 29 mbd, producto de una declinación natural de algunos campos maduros.
En el periodo octubre-diciembre del año pasado, Pemex reportó una pérdida operativa de 24 mil 400 millones de pesos, derivado de que el costo de lo vendido y los gastos de administración y distribución fueron mayores a las ventas trimestrales.
De acuerdo a las últimas cifras, Pemex presentó en enero pasado un déficit comercial de 46 mil millones de pesos únicamente en enero de 2020, lo que contrastó con el superávit alcanzado en todo 2019, de 26 mil 400 millones de pesos.