Tiempo de lectura aprox: 1 minutos, 37 segundos
La presidenta Claudia Sheinbaum condenó de manera firme los discursos y acciones que criminalizan a las personas migrantes, al calificarlos como inhumanos y generadores de mayores problemas sociales, y reiteró que la posición del gobierno mexicano seguirá siendo la protección de los derechos humanos y la cooperación para el desarrollo.
Durante la conferencia de prensa matutina, la mandataria fue cuestionada sobre el endurecimiento del discurso antimigrante en distintos países, incluido Chile, donde se han planteado medidas como plazos para abandonar el país y la instalación de muros fronterizos. Al respecto, Sheinbaum subrayó que la migración no es una elección libre para la mayoría de las personas, sino una necesidad derivada de la pobreza, la desigualdad y la falta de oportunidades.
“La criminalización de las y los migrantes no solamente es un acto de poca humanidad, sino que genera problemas”, afirmó. Insistió en que la mejor manera de reducir los flujos migratorios es invertir en los países de origen, proteger a las personas y combatir las causas estructurales que obligan a migrar.
Sheinbaum recalcó que México no respaldará acciones que criminalicen a las personas en movilidad y que su política seguirá enfocada en la cooperación internacional y la protección de los migrantes. Detalló que, en el caso de quienes llegan a territorio mexicano desde otros países, el gobierno busca ofrecer alternativas, como oportunidades de empleo en México o el retorno asistido a sus países de origen, si así lo deciden, una estrategia que, aseguró, ha dado resultados.
En materia económica, la presidenta se refirió al reciente reconocimiento de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) al papel negociador del Gobierno de México frente a las amenazas arancelarias de Estados Unidos, así como a la proyección de un crecimiento económico de 1.3 por ciento para el próximo año.
Sheinbaum destacó que la relación con Estados Unidos se ha basado en la búsqueda permanente de acuerdos, sin confrontación, pero con principios firmes. “No a la intervención, no al injerencismo, coordinación sin subordinación y reconocimiento como iguales”, puntualizó.
La mandataria celebró además que el representante comercial de Estados Unidos (USTR), Jamieson Greer, haya reconocido recientemente que el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá es un buen acuerdo, aunque susceptible de ajustes, y que ha sido benéfico para las partes. Señaló que este resultado es producto del trabajo coordinado de las secretarías de Economía y Hacienda, así como del diálogo constante en temas de seguridad y comercio.
Finalmente, Sheinbaum reiteró que el gobierno federal mantendrá una estrategia de “cabeza fría” en la relación bilateral, privilegiando el diálogo y la negociación, al tiempo que se fortalece la protección de las y los mexicanos en Estados Unidos mediante el reforzamiento de la red consular y la atención a los paisanos.
