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El conteo de votos sigue avanzando y con el 84 por ciento de mesas escrutadas, Tito Asfura alcanza una ventaja importante contra Salvador Nasralla. El desenlace está cada vez más cerca y tal como pretendía Trump…
Hace unas semanas, de forma intempestiva, sabiendo el alcance de sus palabras y la influencia de las mismas, Donald Trump se involucró de lleno en las elecciones presidenciales hondureñas: “El único verdadero amigo de la libertad en Honduras es Tito Asfura. Tito y yo podemos trabajar juntos para combatir a los narcocomunistas y brindar la ayuda necesaria al pueblo hondureño. Espero que el pueblo de Honduras vote por la libertad y la democracia, y vaya con Tito Asfura como presidente…”.
En esa misma línea, Trump señaló: “La democracia está en tela de juicio en las próximas elecciones en el hermoso país de Honduras el 30 de noviembre. ¿Maduro y sus narcoterroristas tomarán el control de otro país como lo hicieron con Cuba, Nicaragua y Venezuela? Quien defiende la democracia y lucha contra Maduro es Tito Asfura, candidato presidencial del Partido Nacional…”.
Rusia se manifestó en contra de Trump
Lo cierto es que esas palabras desataron una fuerte polémica y una indignación grande, al punto que Rusia se manifestó en contra de Trump por buscar marcar una tendencia electoral en una decisión independiente de la sociedad hondureña. Sin embargo, el mensaje de Trump parece haber llegado con profundidad porque luego de un polémico conteo de votos, Asfura se posiciona a un paso de la presidencia.
El lunes posterior a la elección, el conteo de votos se detuvo por problemas en el sistema. En ese entonces, las mesas escrutadas llegaban al 57 por ciento y la diferencia era de 515 votos a favor de Asfura por sobre Nasralla. Como si fuese poco, el Consejo Nacional Electoral determinó que había un empate técnico y que el conteó de votos iba a reanudarse lo antes posible. Ese panorama hizo enfurecer a Trump, que a través de sus redes sociales, fue directo en su parecer.
Imperativo que la Comisión termine de contar los votos
“Parece que Honduras intenta alterar los resultados de sus elecciones presidenciales. Si lo hacen, se armará un escándalo. El pueblo hondureño votó masivamente el 30 de noviembre. La Comisión Nacional Electoral, el organismo oficial encargado del recuento de votos, suspendió abruptamente el conteo a la medianoche del 30 de noviembre. El recuento se detuvo cuando solo se contabilizó el 57% de los votos. Es imperativo que la Comisión termine de contar los votos. Cientos de miles de hondureños deben contar sus votos. La democracia debe prevalecer”.
Tras esa presión, el conteo de votos se reanudó y ese empate técnico dejó de existir. Actualmente, el CNE lleva 87 por ciento de mesas escrutadas y si bien en política puede pasar cualquier cosa, Asfura se está imponiendo por una diferencia de 19 mil votos, cifra que parece difícil de descontar para Nasralla.
Esta nueva diferencia no hace más que alimentar las sospechas de lo sucedido hace unos días, porque evidentemente, Asfura siempre estuvo mejor posicionado en la elección y pasó de un empate técnico a conseguir una sólida distancia de votos.
“El pueblo hondureño demostró su civismo, amor por la democracia y compromiso con la libertad. Siempre fui firme y claro en mis posturas y sin ataques. Hoy no será diferente, no saldré a decir incoherencias ni alimentaré la incertidumbre. Pido serenidad, es cuestión de tiempo, el CNE dará los resultados finales. Sigamos confiando en el conteo de votos para el bien de Honduras”, manifestó Asfura en las últimas horas.
El final de una elección histórica se asoma en Honduras y el resultado, una vez más, es el que pretendía Donald Trump. Para la región es un cambio drástico porque Honduras dejará de ser cercano a Venezuela, Colombia y México para acercarse a Estados Unidos y sus aliados.
